Hay acontecimientos en la vida que nos marcan como seres humanos, ya sea en mayor o en menor medida. Pero a veces, nos cuesta reconocer que no podemos controlar totalmente todo lo que ocurre o va a ocurrir en nuestra vida. A esos periodos de tiempo se le llama ciclos o etapas vitales, son aquellos procesos que tienen un inicio, un desarrollo o un final diferenciados y que nos trasladan hacia otra situación diferente o inesperada.
Ser capaces de transitar por estas etapas de la vida, sin que nos afecten excesivamente, es vital para no estancarnos y sentirnos tristes todo el tiempo. Por ello, te enseñamos 7 maneras de aprender a cerrar estas etapas de vida de manera sana si es que has estado teniendo problemas últimamente.
7 maneras de aprender a cerrar etapas de la vida sanamente
Los acontecimientos que pueden dar lugar a cerrar una etapa o un ciclo son muy diversos y de distinta naturaleza, entre los más comunes se encuentran: un divorcio, el fallecimiento de un ser querido, terminar una relación, recuperarte de un accidente, terminar la universidad, etc. Para cerrar estos ciclos de manera sana, es necesario seguir los siguientes pasos:
- Aprender a dejar ir lo que pertenece al pasado: Cuando un acontecimiento ha marcado fuertemente nuestra vida, es complicado dejarlo ir, porque naturalmente tenemos miedo a lo desconocido, a la novedad o a la incertidumbre. Despedirse de la etapa con todo lo que conlleva a nivel emocional, evitará centrarnos en aquello que nos hizo daño en el pasado y así poder avanzar.
- Hacer un balance: Luego de despedirse de ese ciclo, el duelo es lo que sigue, ya que estamos dejando atrás una realidad que fue importante para nosotros. Debemos hacer un balance entre lo positivo y negativo que nos ha aportado este ciclo, analizar los sentimientos, emociones y experiencias que hubo en esa etapa servirá para seguir avanzando.
- Recordar el esfuerzo realizado: Debemos recordar todo el esfuerzo que pusimos en esta etapa y centrarnos en lo positivo, lo cual hará que nos sintamos orgullosos de nosotros mismos, seremos conscientes tanto de nuestro valor como seres humanos como de nuestra gran capacidad de hacer frente a las adversidades.
- Aprender de los errores: Aprender de los errores que hemos cometido en el pasado es algo que nos beneficiará mucho en el futuro. Todos sabemos que de los errores se adquieren conocimientos sumamente relevantes para aplicar en el futuro y en el resto de nuestra vida, para evitar cometerlos nuevamente.
- Perdonarnos: Siempre se dice que perdonar a los demás es más fácil que perdonarse a sí mismo, es importante evitar reprocharnos por lo vivido en el pasado. Esto se consigue aceptando todo lo sucedido y no culpándonos de aquellas cosas que hayan podido ir mal, sin lamentos, ya que lo ocurrido no se puede cambiar.
- Establecer nuevos objetivos: Una vez se ha pasado por todo este proceso, es importante proponernos nuevas metas de vida, debido a que hemos dejado atrás la etapa anterior y es necesario encontrar motivaciones nuevas que mantengan nuestra atención a lo que está por venir.
- Pasar a la acción: Una cosa es pensarlo, pero otra muy diferente es hacerlo. Debemos empezar a poner en práctica esos objetivos que habíamos reflexionado hacer. Cuando comencemos a hacer esas cosas nuevas, será más fácil dejar atrás lo sucedido y comenzar a caminar hacia el futuro.
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