Lo que dijeron los linceños - Audiencia Vecinal en Lince
Linceños en voz alta
¿Cercanos al paraíso?
Por: Lucy Torres Linares all>
Fotos: Alessandro Currarino
“Las frases tan bonitas que escucho me hace pensar que vivo en el paraíso” dijo visiblemente contrariada, Henny Tejeda, economista, dos veces delegada vecinal de la zona 8 al escuchar a varios de sus antecesores agradecer y alabar la gestión del alcalde Martín Príncipe.
“Yo les voy a decir lo que pensamos un grupo de señoras y vecinos de Lince, tenemos que lamentar que en los últimos años nuestro distrito ha sufrido un retroceso en el orden y adecuado del uso del espacio urbano lo que ha afectado la calidad de vida de los ciudadanos que elegimos y decidimos comprar o alquilar nuestras casas y vivir en Lince con orden y en paz de las distintas zonas”. Luego, procedió a enumerar situaciones irregulares y a dar las alternativas que ella y sus vecinos habían preparado.
Así como ella, en uso de su derecho a la libertad de expresión y de participación ciudadana- algunos vecinos pusieron el dedo en la llaga de Lince con la voluntad de que el alcalde y el comisario les escuchen y puedan revertir aquello que hace daño al distrito y por ende, a los que viven allí.
Otro vecino, aún de oposición, como el representante del Partido aprista peruano, Milciades Ochoa, hidalgamente dijo: “… quiero expresarle a usted señor alcalde nuestro agradecimiento por las obras que hace. Creo que es difícil no reconocer la gestión ¿No creo que sea antidemocrático? Y creo que es importante reconocer lo que se hace pero también es importante reconocer que no estamos en un paraíso y eso justamente es lo que hay que trabajar y hay que trabajar, por ejemplo, en el tema de presupuesto participativo.
No solamente obras de cemento y ladrillo sino también obras de desarrollo social, desarrollo humano y de eso hay experiencia en algunos distritos”.
Aplausos y pifias se escucharon luego de su participación. Y cuando alababan las obras, los aplausos y vivas alegraban el ambiente. Así es la democracia.
Lince, ese distrito pequeño (278.5 hectáreas) y apacible fundado en 1936 – llamado “el corazón de la ciudad”- ha cambiado vertiginosamente para convertirse en un distrito dormitorio más, donde mucha gente de otras zonas viene a trabajar en el comercio. Y con este crecimiento netamente comercial han llegado también problemas como: hacinamiento, ruidos molestos, cambios de residencialidad, residuos sólidos, contaminación, tránsito, delincuencia, etc.
Basta con darse una vuelta por José Leal, Arenales, la Av. Arequipa, Petit Thouars y aledañas para encontrarse con casinos, supermercados, bancos, negocios, karaokes, restaurantes, hoteles y discotecas al por mayor. Lo cual no tendría nada de malo si no fuera porque muchos de ellos están junto a viviendas y eso, es un calvario sin final, como lo denunció a viva voz la señora Carmen Landázuri, quien nació hace más de ochenta años en Lince y tiene por vecina a la discoteca Kímbara, negocio que según dijo después el alcalde, “tiene autorización de Defensa Civil”.
Sí, como lo leen y pueden revisar la transcripción de la Audiencia. Eso dijo el alcalde. Y eso que la vecina ha presentado cartas y cartas a la Municipalidad y, como contó, los mismos funcionarios municipales fueron ocho veces a su casa en horas de la madrugada para medir los decibeles. Ella y los otros vecinos de la cuadra 24 de Ignacio Merino, ruegan a Dios que les solucionen en problema. Pero, y con justicia, esperan también que el alcalde haga algo más por ellos.
Fue interesante también escuchar que se ha mejorado pistas, veredas, se ha colocado rampas -algunas de ellas necesitan revisión- que se ha hecho muchas obras físicas y que se trata como se debe a los adultos de la tercera edad. Hay compromiso de por medio de construirles su Casa del Adulto mayor; de seguir brindando talleres y demás servicios a la ciudadanía. Pero, nunca está demás que lo dicho por sus conciudadanos sea tomado en cuenta por el alcalde y sus funcionarios que estuvieron en la Audiencia.
El alcalde Martín Príncipe es reelegido y ha hecho muchas obras – las detalló al final de la Audiencia con un video lleno de fotos e inauguraciones- eso es indudable, como lo reconocieron con creces más del 60% de los linceños que se inscribieron en el rol de oradores y, que por cierto, llegaron muy, pero muy temprano para hacer su colita. Pero, Lince necesita y merece más, a decir de quienes viven allí.
Había 16 mil linceños cuando el presidente Augusto B. Leguía, en su oncenio, comenzó los planes urbanísticos en este distrito y hoy, han aumentado a 55 mil. El Parque Mariscal Castilla – reserva ecológica desde antes de esta gestión- es uno de los más bellos pulmones de la ciudad, es verdad y cuentan con más parques bellos. Mucho tiempo y cemento ha pasado desde 1936 pero Lince sigue en el corazón de Lima y en el de los que habiendo nacido o vivido allí quieren mejor futuro para su distrito, reclaman apertura y transparencia además de buenas obras. Al parecer, razones no les faltan.
Siga los detalles de cada participación accediendo a la transcripción completa de la Audiencia Vecinal en Lince, vea los detalles ya cada participante en el álbum de fotos, lea y disfrute de lo publicado en la edición impresa: 1, 2 y 3.