Vivir en una casa de vidrio puede sonar divertido: linda vista, luz natural y contacto con el entorno. Pero también tiene su lado malo como la poca privacidad, la falta de seguridad y el sacrificio que implica la limpieza de ventanas tan grandes.
El estudio de arquitectos DRMM intentó darle una solución a los aspectos negativos y así elaboró un proyecto tan extraño como creativo: colocar un techo que se desliza sobre la superficie de vidrio tanto como el propietario desee.
En la localidad de Suffolk, Reino Unido se encuentra esta casa rodeada de belleza natural que buscó ser aprovechada al máximo creando un diseño que permite contemplarla y, al mismo tiempo, vivir con seguridad. Aunque parece una casa común y corriente, la sorpresa aparece cuando el techo empieza a deslizarse y deja ver la estructura de vidrio que hay debajo.
El movimiento del techo permite tener distintos tipos de iluminación en casa, nivelar la temperatura según la estación del año y disfrutar del paisaje de una manera envidiable. Todo eso se logra gracias a un control remoto que controla el deslizamiento de la estructura de casi 20 toneladas de peso.
Una creativa opción para casas de playa o de campo.