The Living Project es una instalación artística creada en conjunto por Jacob Douenias y Ethan Frier que busca profundizar en el vínculo que hay entre los seres humanos y los microrganismos insertándolos dentro de las viviendas.
La exhibición consta de una serie de lámparas que no solo decoran el espacio sino que han sido convertidas en el hábitat perfecto para las algas de espirulina. Además de iluminar, los envases de vidrio generan calor que beneficia no solo a las personas sino también a las algas que viven en el interior.
Cada una de las nueve piezas de The Living Project está conectada a una estación pensada especialmente para el cultivo de la espirulina. Una vez que ésta tiene un tamaño considerable, es retirada y reemplazada por agua y algas nuevas. Luego son secadas y trituradas hasta convertirse en el polvo ampliamente conocido por sus cualidades nutritivas.
Al ser un alga, la espirulina que cuelga de las lámparas ayuda también a mejorar la calidad del aire del espacio donde se encuentra eliminando el dióxido de carbono.
Conoce más del funcionamiento de The Living Project en este video: