La carrera se llevó a cabo luego de un accidente en la primera vuelta que involucró a Nico Hulkenberg, quien fue enviado a las barreras y eventualmente puesto boca abajo por el piloto francés Romain Grosjean. El piloto de Renault resultó ileso y pudo bajarse de su auto.
Grosjean tiene la reputación como uno de los pilotos más osados, o aventureros, de la Fórmula Uno. Provocó el choque al sujetar la llanta trasera derecha del auto de Hulkenberg, el cual salió disparado, dio dos vueltas de campaña y quedó volcado.
Mientras salía algo de humo del auto, el asustado piloto de Renault pedía a su equipo que los sacara rápido.
“Estoy colgando aquí como una vaca”, dijo. “Hay fuego. Hay fuego”.
Un preocupado Grosjean preguntó sobre la condición de Hulkenberg en su radio. No se tomó ninguna acción contra el francés, alegando que había sido un accidente de carrera.
“Me sentí muy mal por él, pero no había otro lugar al que pudiera irme”, dijo Grosjean.
Agencia AP