Barcelona logró poner la paridad en el clásico de Cataluña. Luis Suárez acortó la distancia a los 49’ con un derechazo sorpresivo en el área del Espanyol. La pelota se coló en el palo del arquero, que no tuvo tiempo a reacción.
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No pasaron ni cinco minutos para que el Barcelona logre crear una jugada de peligro que les permita acercase a la victoria en el clásico de la ciudad. Fue de la mano de los centrocampistas para que se cree la jugada que terminó en gol.
Tras un pase de Sergio Busquets para Frenkie de Jong,el holandés vio solo a Jordi Alba. El 18 del Barcelona mandó un centro al vacío para que Luis Suárez anticipe su pierna derecha y saque un disparo inesperado para el arquero Diego López y convierta el segundo gol del partido.
