Si bien resulta insólito pensar que el Christoph Kramer es el alemán que no recordará la final del Mundial Brasil 2014 pese a jugarla, vale recordar cómo fue la jugada nocaut que le ‘borró’ de la memoria el partido más importante de su vida.
En el estadio Maracaná, a los 16 de minutos del juego ante Argentina, el zaguero Ezequiel Garay arremetió con vehemencia en la disputa del balón y su hombro impactó muy fuerte en el rostro de Kramer. El joven alemán nunca se percató de la llegada del defensor rival y luego del fuerte golpe cayó como una bolsa de carne al césped. El resto ya se conoce.