El árbitro Germán Delfino, quien fue suspendido este mes tras haber revisado un fallo a través de la tecnología en un partido por la liga argentina de fútbol, dirigirá la ida de la serie entre River Plate y Boca Juniors por los octavos de final de la Copa Libertadores.
Delfino quedó en el ojo de la tormenta por revertir un fallo en el que había cobrado penal para Vélez Sarsfield y expulsado al colombiano Daniel Rosero Valencia de Arsenal por tocar la pelota con la mano cuando disputaba el balón con el delantero Mariano Pavone, en un partido por la octava jornada del torneo.
Mientras discutía el fallo con los jugadores de Arsenal, el árbitro dio marcha atrás en su decisión tras ser advertido por uno de sus asistentes que, según las imágenes de la televisión, la pelota la había tocado Pavone y no el colombiano.
En ese momento, la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) dijo que Delfino fue sancionado por "procedimiento desprolijo".
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— SportsCenter (@SC_ESPN) abril 29, 2015
Delfino volverá a dirigir el clásico en el estadio de River luego de que el año pasado le cobrara un penal a Boca Juniors a los 17 segundos de la vuelta de semifinales en la Copa Sudamericana.
Delfino, muy cuestionado por los hinchas de River por el penal, dijo estar muy contento por la designación de la Conmebol.
"Es un partido que esperaba con mucha esperanza. Recién me estoy enterando y todavía estoy medio exaltado. Estoy muy feliz y contento de estar nuevamente en un encuentro tan importante", dijo Delfino, de 36 años, a una radio local.
(Fuente: Reuters)
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