Municipal y una lectura de su buena racha, por Daniel Peredo

Los 80 años de Municipal lo encuentran en una posición expectante. No es la Academia, pero se defiende. Un equipo incómodo para cualquiera, que hace pesar su localía, que le corta posibilidades de asociación al contrario y que evita espacios en el último cuarto. Suma cinco partidos sin recibir un gol y no ha necesitado de un arquero determinante.

Delgado, como siempre, se destaca por su personalidad y presencia. El fútbol está lleno de elecciones y Francisco Melgar decidió por un proyecto conservador. “Es mejor un mal sistema táctico con todos convencidos que un buen sistema sin convencimiento”, explicaba Bielsa en 1998. Muni ejecuta bien su plan. No es ni el primero ni el último que tiene éxito con este modelo. No cualquiera le gana a la ‘U’ y Cristal en una semana.

Municipal cede el elemento y prioriza la solidez defensiva y el juego aéreo. Una idea que beneficia el rendimiento de sus zagueros Zela y Barrera. El gusto por otra propuesta no significa descalificar las demás. Esta versión edil presenta un colectivo que defiende mejor de lo que ataca; lleva al rival al error y capitaliza. Ha sumado un delantero con capacidad para resolver: Bulos.

En resumen, presión intensa y ordenada en los metros decisivos, no dejar recibir cómodos a los rivales, negar pases filtrados; y contraataque y pelota parada para desequilibrar. Nadie es dueño de la verdad. Es fácil criticar los planteos contrarios. Lo difícil es superarlos.

LEE TAMBIÉN: