Golden State Warriors se hicieron fuertes en su casa y derrotaron 126-85 a los Houston Rockets, poniendo 2-1 la final de la Conferencia Oeste de la NBA.
Los vigentes campeones, que ganaron el primer juego en Houston pero fueron superados de principio a fin en el segundo, se apoyaron en Stephen Curry, Kevin Durant y su sólida defensa para ponerse de nuevo por delante en la serie.
Y eso que los Rockets, el mejor equipo de la liga en temporada regular, avisaron al comienzo de que iban con todo a por el triunfo, con un parcial inicial de 8-4 que obligó a Steve Kerr a pedir tiempo muerto.
Pero, tras algunos ajustes, apareció el equipo imbatible de la temporada pasada, el de las mejores noches de los últimos años: insuperables atrás y letales en ataque.
Del 4-8, los locales firmaron un parcial de 9-0 y recuperaron la delantera, imponiendo un ritmo de juego endiablado, cortando líneas de pase y, ante el mal arranque exterior de los suyos, machacando la pintura una y otra vez.
Solo Harden, en acciones aisladas, ponía en dificultades a los de Oakland, que maniataron a Chris Paul. El base de los texanos se sentó tras cinco minutos sin haber visto el aro y anotó su primer punto, desde el tiro libre, a falta de tres minutos para el descanso.
Resumen del partido
Paul, en la primera final de conferencia de su carrera, es una pieza fundamental para los suyos, que lo necesitan a su mejor versión para poder aspirar a destronar a los campeones.
Enfrente, Stephen Curry tampoco parecía él mismo. El miembro de los "Splash Brothers" aún parecía lejos de su mejor versión luego de haber vuelto de una lesión de rodilla en semifinales ante los Pelicans de Nueva Orleans.
Así, a pesar de estar liberado, arrancó con un 2/7 en el tiro, 1/6 en triples en los primeros nueve minutos, visiblemente frustrado luego de sellar 1/6 y 1/8 desde esa distancia en los dos primeros juegos de la serie.
Sin embargo, los Warriors no lo echaron de menos en los primeros compases, lanzados por un brillante Durant, el factor diferencial de Golden State durante todos los Playoffs.
El ex de los Thunder vio cómo le lanzaban diferentes defensores durante toda la contienda y los superó a todos ellos por tamaño y talento puro.
Golden State, con él a la cabeza, firmó un 11-0 final para acabar 31-22 los 12 primeros minutos.
Los Rockets, con Paul desaparecido y Harden demasiado solo, no encontraban vías de anotación y, cuando aparecían, fallaban sorprendentemente.
No en vano, acumulaban 11 bandejas o mates errados a mediados del segundo cuarto y se marcharon al descanso 11 abajo (43-54) con tres tantos y dos pérdidas de Paul frente a las 15 unidades de un superlativo Durant.
INCIDENCIAS EN VIVO
El base Chris Paul, que juega sus primeras finales de conferencia como profesional, y el escolta James Harden, reconocieron tras la última victoria (127-105) conseguida en el segundo partido de eliminatoria del Oeste que disputan ante los Warriors de Golden State, que su equipo jugó mucho mejor que en el primero y estuvo cerca de alcanzar el máximo de nivel.
"Realmente no hubo ningún cambio especial con relación al primer partido que perdidos por 106-119", comentó Paul. "Lo que si sucedió fue que jugamos más duro, pero nuestra química ay entendimiento como equipo fue el mismo".
Paul, que acabó con 16 puntos, señaló que en el primer partido el escolta Klay Thompson hizo 15 intentos de triples, por sólo cuatro en el segundo.
"Ahí es donde estuvo la diferencia, en la manera agresiva con que jugamos y lo bien que hicimos los intercambios a la hora de hacer los marcajes a los mejores tiradores de los Warriors", subrayó Paul. "Era el triunfo que necesitábamos y lo conseguimos".
Paul también destacó que no sólo habían conseguido la victoria sino que también se mostraron el camino a seguir en los partidos que van a disputar en Oakland a partir del domingo con el tercero de la serie al mejor de siete.
Por su parte, James, que acabó con 27 puntos, al igual que su compañero, dijo que lo único que había cambiado fue el nivel de intensidad en el juego del equipo.
"Pienso que en el primer partido jugamos a un nivel del 70 por ciento de nuestro potencial, mientras que esta noche lo hicimos al 95", valoró Harden. "Esta vez fuimos nosotros los que impusimos siempre el ritmo de juego y no dejamos que se sintiesen nunca cómodos a la hora de mover el balón y tirar a canasta".
Harden admitió que tuvieron que analizar con tranquilidad lo que tenían que hacer en el campo para conseguir la victoria y eso fue lo que sucedió.
"No se trató de hacer nada especial, simplemente que como nos sucedió cuando perdimos el segundo partido ante los Jazz de Utah en las semifinales, luego nos sirvió de cara a reencontrarnos como equipo y superar la serie con facilidad", destacó Harden. "Debemos mantener la misma mentalidad del segundo partido y no importa donde vamos a disputar los próximos, porque estoy seguro que vamos a hacer cosas positivas".
Mientras, el alero Kevin Durant, el mejor encestador de los Warriors y del partido al conseguir 38 puntos, reconoció que mentalmente el equipo no tuvo su mejor comunicación y las 15 perdidas de balón no les ayudaron, sobre todos las que sufrieron al comienzo el partido.
"No iniciamos bien el partido y aunque al concluir el primer cuarto estábamos sólo cinco puntos abajo en el marcador, luego ellos mantuvieron su consistencia y nos superaron con tiros muy buenos como los que logró PJ Tucker desde las esquinas y las penetraciones de Trevor Ariza".
Durant dijo que aunque los Warriors habían conseguido el triunfo que les da la ventaja de campo, lo sucedido en el segundo partido debía ser analizado con tranquilidad en los próximos días y llegar al tercero con otra mentalidad y que no debía ser otra que la de luchar al máximo durante los 48 minutos que estuviesen en el campo.