Apasionado del ajedrez y respetado en LaLiga por su gusto por el buen juego inspirado de los preceptos de Johan Cruyff, Quique Setién (61 años), un entrenador casi desconocido fuera de España, ha sido el elegido por el FC Barcelona para sustituir a Ernesto Valverde, después de haber hecho brillar a equipos modestos.
El nuevo entrenador del Barça se ha hecho un prestigio como técnico en las últimas dos décadas y, sobre todo, por la campaña realizada al frente del Betis en 2017-2018, cuando el equipo verdiblanco enamoró con su juego ofensivo, del que el Barça de Valverde también fue víctima, al perder 4-3 en el Camp Nou en noviembre de 2018.
Pese a no entrenar a grandes clubes (Racing de Santander, Logroñés, Lugo, Las Palmas y Betis, entre otros) el buen juego ofrecido por sus equipos hizo que la prensa española comparase el estilo del técnico santanderino con el famoso ‘tiki-taka’ catalán, ese juego de pases y posesión que Pep Guardiola implantó en la época dorada del club (2008-2012), inspirado a su vez de los principios futbolísticos de Cruyff.
“Existe un nexo que une a Guardiola y Setién”, admitió Marc Bartra, ex defensa del Barça ahora en el Betis, en una entrevista al diario El País en septiembre de 2018. “En este Betis, he reencontrado los entrenamientos que tenía con Guardiola y Luis Enrique”, dijo el central, entonces entrenado por Setién en el equipo andaluz.
Esteta, Setién ha admitido ser un admirador del juego azulgrana y, en particular, del séxtuple Balón de Oro Lionel Messi.
“Es un lujo haber podido conocer a Messi y poderle ver jugar cada semana. Él solo desbloquea casi todos los partidos. En su último gol, he tenido la impresión de que estábamos jugando a la PlayStation”, destacó el técnico tras una derrota con su equipo 4-1 frente al Barcelona, el 17 de marzo de 2019.
Esa misma noche, Sergio Busquets, uno de los estandartes del Barça, le regaló una camiseta dedicada: “Para Quique con estima y admiración por tu manera de ver el fútbol”.
Nacido en Santander (norte), donde comenzó su carrera como futbolista profesional (de 1977 a 1985 y de 1992 a 1996), Setién destacó como un elegante centrocampista, sobre todo en su etapa en el Atlético Madrid (1985-1988), que coincidió con su llegada a la selección española, participando en el Mundial de 1986, aunque sólo llegase a disputar tres partidos con la Roja.
Si no llegó a destacar más como futbolista, fue por no encontrarse a gusto encorsetado en los rígidos sistemas tácticos de la época: “Los entrenadores te dirigen y te piden cosas que a veces no entiendes o con las que no estás de acuerdo, como era en ocasiones mi caso. A veces intentaba hacer lo que me pedían y no me salía. En el campo me intentaba mover con libertad, hacer mi fútbol. Fue cuando vi jugar al Barcelona de Cruyff cuando empecé a entender cómo funcionaban realmente las cosas. Aprendí muchísimo con ellos”, declaró Setién al diario marca en mayo de 2018.
Como entrenador ha pasado por diversos banquillos del fútbol español en casi dos décadas de profesión: Racing de Santander (2001-2002), El Ejido (2003-2004), Logroñés (2007-2008), Lugo (2009-2015) y Las Palmas (2015-2017). Incluso fue seleccionador de Guinea Ecuatorial, aunque sólo dirigió al combinado un partido por desavenencias con los directivos (2006-2007).
En el Betis, en la mágica temporada 2017-2018, el fútbol de Setién llegó a su máxima expresión, clasificando a los andaluces para la Europa League, aunque en la temporada siguiente los resultados no se mantuvieron, sobre todo por los problemas defensivos derivados del estilo del santanderino, llevaron a la entidad sevillana a poner fin a su relación, un año antes del final de su contrato.
En noviembre de 2018, Setién se convirtió en el único entrenador en los últimos 10 años en haber derrotado al Barcelona en el Camp Nou (4-3) y al Real Madrid en el Santiago Bernabéu (1-0 en septiembre de 2017).
Sin embargo, la experiencia europea de Setién se reduce a una temporada con el Betis en la Europa League, eliminado por el Rennes francés en dieciseisavos de final (3-3, 1-3).
Es la gran incógnita del nuevo entrenador azulgrana, que debe buscar soluciones para implantar su ideal futbolístico a un Barça que trata de recobrar su ADN.
¿Estará capacitado para gestionar un vestuario lleno de estrellas? ¿Dará con la solución para jugar en ataque sin Luis Suárez, de baja hasta mayo tras ser operado de la rodilla, y sin el francés Ousmane Dembélé hasta finales de febrero?
Antes del clásico de vuelta con el Real Madrid el 1 de marzo, Setién deberá afrontar la ida de los octavos de final de la Champions League, frente al Nápoles el 25 de febrero. Un torneo que el santanderino desconoce, pero que le puede catapultar a hacerse un nombre en el planeta futbolístico.