Han transcurrido dos semanas desde que el Gobierno publicó el decreto supremo (DS Nº 009-2022-EM) que confiere a Petro-Perú la luz verde para suscribir el contrato de explotación del lote 192 (Loreto), la operación hidrocarburífera que más crudo ha producido en la historia del país.
La noticia fue relievada por el mismo presidente de la República en su Mensaje de 28 de Julio como el hito que “marca el reingreso de Petro-Perú a las actividades de explotación petrolera en la selva peruana después de 26 años”.
LEE TAMBIÉN: Gobierno entrega el 100% del lote 192 a Petroperú: ¿qué sucederá después?
Se trata de una oportunidad inmejorable para la estatal, pues todo apunta a que el precio del petróleo se mantendrá elevado por tres años más, tiempo suficiente para reactivar la producción del lote y hacer rentable la nueva refinería de Talara con producción propia, apunta Víctor Saavedra, CEO de VSConsulting. Pero, ¿qué se necesita para conseguir esto?
LOTE VANDALIZADO
Los desafíos para devolver su antiguo brillo al lote 192 no son pocos ni pequeños. De acuerdo a sendos informes de la Contraloría, el campo petrolero ha “sufrido daños y deterioro por falta de vigilancia adecuada” en los últimos dos años.
Una evaluación inicial realizada por Altamesa Energy, empresa con la que Petro-Perú firmó un contrato de asociación a fines del 2021, arrojaba un presupuesto de cerca de US$17 millones para realizar las reparaciones respectivas.
Sin embargo, el regulador Osinergmin estima que se requerirán US$50 millones o US$60 millones más. ¿Quién debería pagar por estos arreglos?
Tanto Petro-Perú como Perú-Petro - entidad encargada de suscribir los contratos de petróleo y gas - consideran que la responsabilidad no es suya sino del otro. De Perú-Petro, porque fue y es el encargado de vigilar el lote desde hace dos años, lapso en el cual sus activos fueron vandalizados. Y de Petro-Perú, por ser el contratista.
La polémica, según fuentes del sector hidrocarburos, se resolverá muy pronto, pues Perú-Petro buscaría firmar el contrato de licencia con Petro-Perú en el tiempo más corto posible para zanjar de una vez el dilema.
Trascendió, sin embargo, que la Junta General de Accionistas de Petro-Perú dirá la última palabra al respecto.
No obstante, Víctor Saavedra considera que esto no debería ser un problema para la petrolera estatal, pues puede relanzar la producción del lote de manera gradual, empezando con los pozos más fáciles de reactivar, lo cual llevaría a obtener 2.000 barriles por día (bpd) de crudo “sin grandes esfuerzos”.
“Esto servirá pagar al personal y conseguir el dinero que se necesita para ir subiendo gradualmente el número de pozos y la producción hasta lograr unos 6.000 o 7.000 bpd”, señala el ingeniero de petróleo.
En su concepción, esto podría lograrse aun cuando Petro-Perú ingrese sin socios al lote. Y ese el siguiente desafío que la empresa estatal debe afrontar: ¿Con qué empresa – caso de ir con una – se asociará?
ALTAMESA ENERGY
El directorio de Petro-Perú firmó en agosto de 2021 un contrato de inversión conjunta con Altamesa Energy, el cual fue observado por la administración de Mario Contreras (expresidente) y Hugo Chávez (exgerente general).
Como resultado de ello, el Ministerio de Energía y Minas (Minem) solicitó en el 2022 dos informes, uno técnico y otro legal, para evaluar la idoneidad del contrato.
Humberto Campodónico, presidente de Petro-Perú, indica que ambos serán discutidos próximamente por el Directorio de la empresa. Cualquier cosa que esta decida, sin embargo, deberá ser contrastada con un informe similar de la Contraloría, que tarda en llegar, pero que será vital para que Petro-Perú adopte una determinación.
Lo que sí está claro por lo pronto, anota Campodónico, es que la estatal debe ir acompañada de un socio porque “también que ocuparse también de la nueva refinería” de Talara.
De hecho, el DS Nº 009-2022-EM autoriza a Petro-Perú a suscribir el contrato del lote 192 siempre que no demande “por ningún concepto, recursos adicionales al Tesoro Público”.
Y esto supone otro desafío ¿Cómo transportar la producción de crudo hacia los mercados con un oleoducto detenido y deteriorado, que requiere indudablemente una inyección de dinero?
OLEODUCTO EN CRISIS
Petro-Perú gasta, aproximadamente, US$50 millones en mantener el Oleoducto Norperuano, a pesar de que este no bombea petróleo regularmente y que, cuando lo hace, es blanco de todo tipo de atentados.
Por esta razón el Instituto Peruano de Ingenieros de Gas y Petróleo (IPIGP) propuso meses atrás reemplazar esta infraestructura por una más moderna, pero de menor diámetro, que se ajuste a la capacidad productiva de la selva norte peruana.
Víctor Sanz, vicepresidente del IPIGP, señala que Petro-Perú debe elaborar con urgencia un informe técnico de la situación de esta infraestructura para conocer, a ciencia cierta, si está en condiciones de seguir transportando crudo o no.
Mientras tanto, Petro-Perú puede evacuar la producción del lote 192 por vía fluvial rumbo al Atlántico, como lo viene haciendo Petrotal con el crudo del lote 95, anota Saavedra.
Petro-Perú ha estimado que el reinicio de producción en el lote 192 no ocurrirá antes de doce meses, tiempo suficiente para que haga los ajustes necesarios.