Pocas horas bastaron desde que la Organización Mundial de la Salud (OMS) declarara al coronavirus (COVID-19) como una pandemia para que miles de peruanos se abarrotaran en diversas cadenas supermayoristas y de supermercados para comprar desmesuradamente ciertos productos, algunos –incluso– sin razón.
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Esta nueva coyuntura que –sin duda– plantea nuevos desafíos al supermercadismo, también abre el debate sobre ¿cuál es su potencial y si podrá crecer, pese a la agresiva expansión de otros formatos modernos de comercio minorista como las tiendas de descuento (‘discounters’) y de conveniencia?
En el 2019, los márgenes de rentabilidad de los principales supermercados Wong y Metro (Cencosud), Hipermercados Tottus (Falabella), Plaza Vea y Vivanda (Supermercados Peruanos, Intercorp) cayeron respecto al año anterior. La mayor dinámica promocional y un menor tráfico en tiendas como resultado del impacto de los nuevos formatos de conveniencia fue el detonante de este resultado,
Falabella con Tottus e Hiperbodega Precio Uno, que no es un supermercado en sí, reportó un incremento de 2,2% en sus ventas ‘same store sale’ (que compara el mismo número de locales de un año frente a otro) versus el 6% del 2018. Mientras que, Cencosud redujo hasta setiembre en 4,5% sus ventas ‘same store sale’.
“La expansión de los supermercados se ha detenido y el nicho ha sido cubierto con el desarrollo y la proliferación de las tiendas de conveniencia, que con un diseño y formato claro se están expandiendo a gran velocidad”, afirma Ernesto Aramburú, director gerente de Inversiones y Asesorías Araval.
No en vano la pobre apuesta por abrir nuevos locales en los últimos cinco años, como se detalla en la infografía que acompaña este informe.
El crecimiento de doble dígito que siete años atrás reportaban los supermercados hoy es solo un bonito recuerdo.
PROYECCIONES
Pero, ¿qué le deparará al supermercadismo este año? parece que la realidad que enfrentó en el 2019 se podría repetir.
Francisco Luna, country manager de Kantar Worldpanel Perú señala, en base a proyecciones de Macroconsult, que las ventas de esta industria retrocederán 0,2% en el 2020. Contrariamente, las tiendas de descuento (como Mass y Vega) crecerán 42,8%; las de conveniencia (como Tambo y Oxxo, entre otras) 19,1%, Tottus (Falabella) y formatos como Hiperbodega Precio Uno alrededor de 43,7%.
El consultor refiere que ni las exacerbadas compras por efecto del COVID-19 harán que las ventas levanten.
Luna y Rolando Arellano, presidente de Arellano Consultoría, coinciden en que esto es temporal, porque la gente tiene una capacidad limitada de espacio en su casa y porque luego de ‘stockearse’ dejarán de comprar. Luna señala, incluso, que luego de que pase la histeria vendrá una etapa racional donde la gente preferirá no ir a espacios grandes como los supermercados por temor al contagio y optará más por la proximidad. Es decir, por comprar en las tiendas de conveniencia y de descuento.
La investigadora de mercado Euromonitor International tiene un pronóstico más alentador. Esta estima que los supermercados e hipermercados en el 2020 crecerán a un ritmo de 1,7% y 2,6%, respectivamente, bordeando en conjunto los US$4.134 millones entre 351 locales (12 más que en el 2019) con énfasis en la expansión de superficies menores a los 2.500 m2.
“Los supermercados seguirán creciendo, pero con más cautela y en ubicaciones seleccionadas, generalmente en lugares poco cubiertos o en pleno desarrollo, donde se pueda generar una oportunidad de captura importante y una barrera de acceso”, precisa Aramburú.
Comenta que se priorizará la construcción e implementación de locales entre 1.000 y 2.000 m2 de sala de ventas, lo que no quita que siga el desarrollo de las tiendas de conveniencia.
Rolando Arellano también considera que este canal minorista todavía tiene espacio, pero no llegará a los niveles de países como Chile o Brasil, donde la penetración es de 60% y 70%, aproximadamente; mientras que en Lima no llega al 30%.
Cuenta que, en nuestro país el desarrollo del supermercadismo empezó tarde (en los años 90) a diferencia de otros vecinos de la región, y en un momento en el que la composición familiar empezó a cambiar.
“Las familias peruanas se han achicado; la gente, ahora, come fuera de casa cada vez más y dispone de menos espacio para almacenar productos. Por tanto, el concepto de supermercado ya no es tan útil para las familias, especialmente, las modernas. Por lo que el futuro está en la bodega moderna que pueden ser las tiendas de descuento, conveniencia y los minimarkets”, explica el especialista en márketing.
A esto se suma la mayor participación de la mujer en el mundo laboral que hace que divida su tiempo entre la casa y el trabajo y que, por tanto, tenga menos tiempo para comprar, optando por premiar a las tiendas que le queden cerca de casa como un Mass o un Tambo, por poner un ejemplo, dice Francisco a Luna.
NUEVAS APUESTAS
Son, precisamente, todos estos indicadores los que han hecho que se enfríe la expansión de los supermercados. Por eso no es gratuito que los grandes grupos hayan decidido, sobre todo, en el último quinquenio apostar con más fuerza por los nuevos canales de autoservicios como las tiendas de descuento y de conveniencia.
Así, Supermercados Peruanos hoy cuenta con 405 Mass y planea abrir 300 locales más hasta el 2022, solo 100 de ellos se inaugurarán este año. En cambio, el plan para Plaza Vea es sumar dos tiendas más este 2020, y entre dos y tres locales más por año hasta el 2022, precisa Adelberto Muller, vicepresidente de márketing de la empresa.
Además, en el canal online siguen trabajando en implementar más puntos de “click and collect’ y en sus tiendas físicas apuestan por las cajas ‘self check-out’.
Respecto a Vivanda afirma que sí pretenden seguir desarrollando el formato pero, por el momento, no tienen pensado abrir tiendas en los próximos tres años.
El grupo Falabella, por su parte, también está apostando más por Hiperbodega Precio Uno (que es un híbrido entre una tienda de descuento y un ‘cash and carry’, define Luna). La compañía desarrollará 30 nuevos supermercados hasta el 2023.
El único que no ha apostado por nuevos formatos es Cencosud, aunque sí ha logrado flexibilizar su cadena Wong y planea sumar un local más en YOY del Jockey Plaza. El grupo chileno tiene la tarea más difícil porque, probablemente, este año con el cambio de gerente en el Perú [Alfredo Mastrokalos] se concentrará primero en recuperar la participación cedida a la competencia. “Cencosud ha perdido mucho terreno. Metro y Wong llegaron a tener el 61% del mercado y hoy tienen 29%; Supermercados Peruanos 37% (incluyendo Mass) y Falabella 31%”, detalla Aramburú.
Al cierre del 2019, a nivel de tiendas de conveniencia y de descuento entre Tambo, Oxxo y Mass suman 816 puntos de venta y hay 160 anunciados para el 2020, sostiene. Ante esta gran ofensiva, a los supermercados les queda mantener lo ya ganado y mejorar la experiencia de compra en sus tiendas físicas y virtuales para diferenciarse.