En entrevista, el Gerente Principal del Departamento de Estudios Económicos de Scotiabank Perú, Guillermo Arbe, hace un repaso de las principales proyecciones para la economía este año. Además, realiza una revisión de los factores que incidirán en el 2025, tanto a favor como en contra el crecimiento.
MIRA: ¿Cuál será el desempeño de las principales economías que conforman el APEC durante el 2024?
¿Ha variado la previsión de crecimiento para este año?
Estamos en línea con nuestra proyección de 3%. Están pasando las cosas más o menos como lo esperábamos. Con una segunda mitad mejor que la primera. Creciendo entre 3,4% y 3,6% en los últimos dos trimestres.
¿Qué factores predominan?
Hay dos cosas notables este año. La primera es la inversión pública y el consumo público que han crecido en los primeros dos trimestres. La inversión privada es la que más estamos viendo que está tardando en recuperarse. El consumo ya está mejor, sobre todo en el tercer trimestre. Aunque sobre ello hay que tener en cuenta que hubo el incentivo del retiro AFP.
Mañana se conocerá la cifra del PBI para setiembre. ¿Qué cifra están esperando? Asimismo, ¿cómo deberían venir los siguientes meses del año?
Estamos esperando un resultado cercano a 3% para setiembre. Entre 2,8% y 3%. En octubre probablemente esté parecido a eso y noviembre tenemos una cosa interesante: la campaña de pesca está muy bien. Eso puede permitir que crezcamos un poco más. Pero, ojo, que noviembre va a ser un mes bastante distorsionado. APEC debería en principio ayudar a que haya más demanda, pero no significativamente. Por otro lado, lo que sí impacta negativamente es tener menos días de trabajo. Ambos factores se compensan. Al final, lo que sí es cierto es que estamos entrando a un nivel de crecimiento crucero alrededor de 3% al mes. Antes teníamos mucha volatilidad porque estábamos creciendo sobre base estadística afectada por El Niño. Eso ya se está limpiando.
Para el 2025, teniendo en cuenta que es un año pre electoral, ¿cuáles son las previsiones de crecimiento?
Esperamos un crecimiento de 2,8%. Demanda interna creciendo 3%, consumo privado creciendo 2,6% y la inversión privada creciendo 3,3%. Vemos que el sector privado ya está creciendo en línea o mejor que el PBI. En realidad, si uno ve los factores que se presentan en el 2025 que tienes Puerto Chancay -que ya este se inauguró-, pero empieza a haber mucha inversión en torno al puerto de Chancay. A ello le sumas la aceleración en inversión en infraestructura a raíz de todas las licitaciones que se han dado desde el 2024, porque se empiezan a ejecutar en 2025. Eso, en un entorno de inflación baja, podría hacernos crecer incluso más de 2,8%. Pero como tenemos la incertidumbre de las elecciones de 2026 es que estamos siendo cautos, porque creemos que hasta que no se aclare el panorama de las elecciones del 2026, la inversión privada va a seguir baja.
Es el principal riesgo.
Sí, y el problema es que en el 2025 no creo que se aclare el panorama aún. Vamos a convivir con ese riesgo.
¿Y existe algún riesgo inflacionario para Perú en el mediano plazo?
El riesgo es que puede haber un nuevo contagio global, porque hay mucha preocupación de que la política del gobierno de de Donald Trump en Estados Unidos termine este siendo inflacionaria en algún momento. No creo que tan rápido como para el 2025, pero sí es un riesgo a tomar en cuenta y que el BCR conoce. Es algo que puede hacer que afecte la política monetaria. Puede ser más cauto en bajar las tasas. Hoy esperamos que siga bajando hasta 4,50%, pero este entorno hace que no se baje necesariamente más la tasa. Otro riesgo en cuanto al manejo del Banco Central de Reserva, que tiene que ver con el 2026, es el cambio del directorio. Eso genera incertidumbre.
¿Es peligroso para nuestra fortaleza fiscal que no se vaya a cumplir este año con la regla de déficit?
No pensamos que se vaya a cumplir. Definitivamente este año con el déficit fiscal en 4% no vemos cómo se puede cumplir. Sin embargo, no creemos que el déficit fiscal de 4% sea inmanejable. La situación fiscal debe mejorar simplemente porque el próximo año se va a pagar impuestos mineros sobre los precios de este año. Habrá un ingreso minero muy fuerte. Bajará el próximo año. Entonces, ‘peligroso’ es una palabra muy fuerte para la situación, porque es manejable.
¿El escenario externo, tras la elección de Trump, sigue siendo favorable para el precio de los metales?
El oro esperamos que esté en US$2.450 frente a US$2.390 de este año y el cobre se mantiene igual en US$4,20. Hay un poco de riesgo en el cobre, porque si hay alguna política de aranceles de Estados Unidos que afecte a China, nos afectaría a nosotros. El riesgo de una reducción del precio de los metales industriales sí se ha incrementado.
Nos encontramos en el marco de la APEC, y se espera anuncios como acuerdos de libre comercio y memorándums de entendimiento que impulsaría el comercio. ¿Cuánto tarde ello en reflejarse en las cifras económicas para el Perú?
Es difícil de identificar el beneficio numéricamente rápidamente. Perú ha firmado un montón de tratados de libre comercio en los últimos 25 años. Y todo eso nos permite tener tanta fortaleza en nuestro sector externo. No es que todos estos acuerdos vaya a gatillar algo particular en un momento particular.