La minera canadiense Bear Creek anunció su intención de iniciar un procedimiento de arbitraje contra el Perú amparada en el artículo 824 del Tratado de Libre Comercio (TLC) entre Canadá y nuestro país debido a la cancelación de sus derechos para operar el proyecto minero de plata Santa Ana, en Puno.
La firma informó que ayer, 11 de agosto, presentó una solicitud formal y está completando las formalidades requeridas para que se inicie arbitraje.
Analistas del sector minero estiman que una demanda de Bear Creek le costaría al Perú cerca de US$1.200 millones.
"Aunque Bear Creek sigue comprometida a continuar las conversaciones con el gobierno del Perú para resolver la disputa respecto al proyecto minero Santa Ana, el inicio del arbitraje es necesario para salvaguardar los derechos de la compañía bajo el TLC entre Canadá y Perú. El inicio del arbitraje contra el Perú no impide que Bear Creek siga participando en las negociaciones para llegar a un acuerdo con el Gobierno peruano, como Bear Creek espera que suceda", dijo en un comunicado.
Recordó que el 6 de febrero del 2014, la minera envió al Ministerio de Economía y Finanzas un oficio comunicando su intención de iniciar el arbitraje, lo cual abrió un periodo de seis meses de consultas entre las partes, tiempo en el cual, de acuerdo a la firma, esta ha continuado sus esfuerzos por llegar a una solución amigable de la disputa.
"No se llegó a ningún acuerdo durante ese periodo. La disputa surge por la decisión del gobierno del Perú de emitir el Decreto Supremo 032 el 25 de junio del 2011 rescindiendo los derechos de la compañía de operar el proyecto minero Santa Ana, lo cual resultó en una paralización completa de las actividades en Santa Ana y en daños significativos a la compañía", reza el comunicado.
Andrew Swarthout, CEO y presidente de Bear Creek, indicó que "pese a que las discusiones hasta el momomento han sido productivas y se han hecho grandes avances hacia un acuerdo, las discusiones aún no han producido un acuerdo final dentro del marco de tiempo definido por el TLC, por lo que la compañía requiere tomar esta acción, que protege los derechos de Bear Creek. El gobierno del Perú continúa mandando un mensaje claro de que desea resolver esta disputa y está comprometido a mantener el ritmo de las negociaciones. Nosotros también seguimos comprometidos en trabajar para llegar a una solución amistosa de la disputa, lo cual esperamos que suceda en el corto plazo".
Swarthout agregó que "el proceso para obtener el permiso del proyecto Corani, de plata, plomo y zinc, que representa gran parte del valor de la compañía, continúa progresando. La ingeniería de detalle, incluyendo la optimización del proyecto, están progresando sólidamente hacia el pedido de permisos en el primer trimestre del 2015 y las relaciones con las comunidades continúan en terreno sólido. La interacción con el Gobierno respecto a Corani sigue siendo positiva".