José Raúl Vargas

En la última década, la industria aérea peruana ha experimentado una evolución, producto de una serie de factores que ha contribuido con la dinamización del sector. La mayoría y las mejores políticas implementadas por el gobierno para la promoción del turismo, así como los esfuerzos del sector privado para acercar el transporte aéreo a las personas lograron que el Perú pase de 8,9 millones de pasajeros nacionales en el 2014 a 13,8 millones en el 2023, un crecimiento de más de 60% que, sin duda, es de aplaudir.

Así, la aviación se convirtió en un actor clave, tomando un rol cada vez más protagónico en el desarrollo y crecimiento del país. Gracias a su eficiencia y resiliencia, la industria ha contribuido con un ecosistema económico que permite conectar los territorios, aportando a la promoción del turismo y al desarrollo de las regiones, posicionándose como una de las promotoras de una cadena de beneficios donde los peruanos somos los ganadores.

Las actuales alternativas de vuelo permiten a los viajeros trasladarse sin escatimar en calidad y seguridad, con precios altamente competitivos. Esto se vio potenciado con la llegada del modelo ‘low cost’ al país, que logró una considerable reducción de tarifas y estimulando que más peruanos vuelen.

Desde el 2017 a hoy, más de 14,5 millones de viajeros en Perú, han preferido a las aerolíneas de bajo costo, logrando incluso que una de ellas se convierta en la segunda a nivel nacional, respecto al transporte de viajeros, desde el 2019.

A partir de este modelo inclusivo, se busca seguir masificando el servicio, con altos estándares de calidad, como el uso de aviones de última tecnología y estrictos parámetros de seguridad; ese el compromiso de Sky Perú desde hace 5 años, en los cuales ha transportado 8,7 millones de pasajeros a nivel nacional, manteniendo hasta hoy el título de segundo operador más importante en el mercado local y confirmando que cada vez más peruanos buscan volar a precios bajos.

La industria aérea, ahora más cercana al ciudadano, ofrece distintas opciones de viaje, según las necesidades de cada pasajero, promoviendo así el turismo interno principalmente. La amplia oferta de rutas y el aumento de frecuencias en regiones aporta a la creación de más empleos, promoción de tributos, entre otros.

El desafío de los siguientes años es continuar trabajando para ofrecer la mejor experiencia en el medio de transporte más rápido y seguro, y que cada vez cuente con mayores beneficios para el viajero, mediante los programas de fidelización, que ya no son un producto exclusivo de las aerolíneas tradicionales.

Hoy las aerolíneas tenemos la posibilidad de seguir impulsando la accesibilidad, para acercar a personas, economías y culturas; abriendo puertas a nuevos recuerdos, reencuentros y negocios e incluso permitiendo la llegada oportuna, para salvar vidas. Es tarea de todos los actores del sector aerocomercial seguir transformando vidas mediante la conectividad, y así lograr poner al cielo al alcance de todos.

José Raúl Vargas, gerente general de Sky Airline Perú.