Seguro de salud, anemia y desempeño escolar, por Pablo Lavado

El Seguro Integral de Salud (SIS) atiende a casi 17 millones de peruanos. Para ser asegurado se estableció una regla que define a un hogar como pobre, sobre la base de sus condiciones socioeconómicas. Junto con Miguel Ángel Carpio (Universidad de Piura) y Lucero Gómez (Universidad del Pacífico), hemos explotado dicha regla con el objetivo de medir si el SIS tiene efectos sobre el desarrollo de los niños. En un estudio anterior, Carpio junto con Bernal (Universidad del Pacífico) y Klein (Universidad de Tilburg encuentran que el SIS incrementó el uso de los servicios de salud. Ante este resultado, emerge una interrogante: ¿el SIS ha tenido efectos sobre la salud?   

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El primer gran resultado que encontramos a partir de la Encuesta Nacional de Demografía y Salud Familiar 2011 es que el SIS contribuyó a reducir los niveles de anemia moderada y severa en 69 puntos porcentuales en niños menores de 6 años, y en reducir la anemia en 23 puntos porcentuales en mujeres en edad fértil. La evidencia está en línea con lo que se puede encontrar en la literatura internacional. 

Este resultado es sumamente importante, ya que la anemia tiene consecuencias negativas en el largo plazo para los niños: las conexiones neuronales no se desarrollan de manera adecuada y, por lo tanto, el desempeño educativo es menor. Es por ello que quisimos explorar efectos de largo plazo del SIS y, en particular, en su desempeño escolar. Para tal fin, buscamos a los niños menores de 6 años en el 2011 de la Encuesta Nacional de Hogares en las evaluaciones censales en educación que se toman en segundo de primaria entre el 2012 y el 2016. Es decir, de dos a cinco años después de estar siendo cubiertos con el SIS. 

A partir de esa búsqueda, encontramos el segundo gran resultado: el SIS ha contribuido a mejorar el desempeño escolar de los niños. En particular, hay un aumento de casi una desviación estándar en las notas de lectura y de matemáticas. Es decir, el SIS no solo ha tenido efectos en la salud de los niños en el corto plazo, sino también en el desempeño escolar, en el largo plazo. Este resultado es muy interesante y poco documentado en la literatura internacional. 

Estas son buenas noticias acerca de cómo el SIS ha contribuido en el desarrollo del capital humano de los niños. No obstante, dos son los retos del SIS. El primero es el uso eficiente de sus recursos. Para ello es necesario el fortalecimiento de las redes integrales de salud con un especial énfasis en el primer nivel de atención y atendiendo cada vez más la anemia y las enfermedades no transmisibles. El segundo es tener al SIS como herramienta de la formalidad, en conjunto con el aseguramiento universal de la salud.