El próximo 24 de setiembre, la Superintendencia Nacional de Aduanas y de Administración Tributaria (Sunat) realizará un nuevo remate de bienes embargados a contribuyentes, con el objetivo de recuperar los valores de las deudas tributarias.
En esta novena edición en el año, que se realiza en Lima, destacan la subasta de departamentos (desde S/210 mil), depósitos (desde S/29 mil), oficinas, entre otros inmuebles.
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Sin embargo, también se ofrecen acciones de compañías, predios rurales, cocheras, terrazas, oficinas y muebles como ropa, equipos de sonido y hasta maquinarias pesadas. El valor total de todos los bienes para este remate superan los S/5 millones.
¿QUIÉNES PUEDEN PARTICIPAR?
Según explicó Alondra Aguilar, funcionaria de la Sunat, en este evento pueden participar los ciudadanos peruanos o extranjeros naturales o jurídicos que estén permitidos de realizar actos válidos legalmente y posean capacidad para adquirir los derechos y administrarlos.
No podrán participar en este concurso el mismo deudor del bien que se remata, los trabajadores de la Sunat, los encargados de la función de peritos, el martillero público y los que hubieran intervenido directamente en el procedimiento de tasación (valorización) y remate, así como también sus respectivos familiares (cónyuge, padrinos tíos).
También están impedidos quienes hayan resultado ganadores en remates previos, pero no hayan cumplido con el pago respectivo.
De no presentar estos impedimentos, las personas solo deben apersonarse al local donde se realizará el remate con su DNI y rellenar, antes del inicio de la subasta, su postura (formato de inscripción).
"Hubo casos donde la postura, al final, fue anulada por un mal relleno y, en consecuencia, se invalidó su participación en el concurso. Es importante su correcto llenado", mencionó Aguilar.
EL PROCESO DE REMATE
En esta instancia, a los bienes en cuestión se les fija un precio; es decir, son tasados. Este valor es definido por un perito. En la primera convocatoria de subasta, el precio base corresponde al 66,6% del monto evaluado por el técnico especializado.
De no lograr venderse, el valor es reducido nuevamente para la segunda convocatoria, pero en 15% sobre el primer ajuste. Mientras que si aún no se efectúa su venta, su precio se reduce en un 15% adicional para un tercer concurso.
Cabe mencionar que los muebles (es decir, maquinaria, equipos de sonidos y similares) para una tercera convocatoria dejan de tener un precio base. Así, la puja empieza desde S/0.
Respecto a los tipos de subastas públicas, existen dos. El encargado de definir cuál se aplicará en cada ocasión es el martillero, dependiendo del tipo de bien que se remate. A la primera se le denomina "A viva voz", ya que consiste en un puja de precios entre los participantes.
En tanto, la otra opción es el "sobre cerrado", mediante la cual los postores presentan sus ofertas de forma reservada, esperando haber realizado la más alta.
"Si vas a rematar acciones de una empresa grande, por ejemplo, se usa el 'sobre cerrado'. Esto porque los tipos de postores tienen una capacidad económica considerable y debe manejarse con reserva", precisó Aguilar.
PROCESO DE ENTREGA DE BIENES
Luego de que una persona resulta ganadora de una subasta, se procede a corroborar su postura (formulario de inscripción al concurso) y que se encuentre permitida de participar. Tras ello, y en el mismo día, esta debe abonar, como mínimo, el 30% del valor del bien a la Sunat en el Banco de la Nación.
Tres días después, previa cancelación del 70% restante del pago y sin ninguna contingencia, el adjudicatario recibirá la resolución de adjudicación del bien, que será inscrito en registros públicos por la Sunat.
"El bien es entregado libre de impuestos; es decir, saneado", puntualizó la funcionaria de la Sunat.
¿CUÁNDO ENTRA EN REMATE UN BIEN?
La funcionaria de la Sunat explicó que un bien entra en proceso de remate cuando todas las instancias para la cobranza se agotaron, quedando demostrado que el deudor no desea cancelar la deuda. En este caso, se trata de un bien mueble o inmueble que ha sido inscrito en la Sunat y gravado con un embargo.
Asimismo, Aguilar mencionó que el contribuyente afectado es notificado que su bien entra a un remate público cuando se da inicio a su tasación, ya que este debe aprobar el valor. De haber un acuerdo, este momento también significa que en los próximos días habrá una convocatoria.
Sin embargo, el contribuyente, ya convocada la fecha de subasta, puede cancelar la deuda antes de iniciado el remate para retener su bien.
Por último, cabe precisar que los remates convocados por la Sunat, para Lima, se realizan mensualmente; mientras que en provincia es bimestral o trimestralmente. En este mes, la superintendencia organizará ocho subastas en todo el país.