Odebrecht presentó una demanda ante el Centro Internacional de Arreglo de Diferencias Relativas a Inversiones (CIADI) contra el Estado peruano, reclamando US$1.200 millones por el proyecto del Gasoducto del Sur.
Pero esta no es la primera vez que el Perú participa en un arbitraje internacional. Hasta la fecha, el Estado peruano ha sido parte en 17 controversias internacionales de inversión que han concluido de manera definitiva.
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De la totalidad de casos, 14 de ellos han significado un resultado positivo para el Perú, incluyendo cuatro casos que han sido resueltos mediante la celebración de acuerdos integrales.
En dos de los casos se logra que el inversionista desista de sus pretensiones (uno de ellos no llegó a arbitraje) y en otro de ellos el Perú fue la parte demandante, siendo el primer Estado Latinoamericano en hacerlo en CIADI.
El Perú ha recibido a su favor, entre penalidades, pago de regalías y devolución de costos, casi US$110 millones como resultado de tales controversias concluidas.
Solo en tres casos, se ha ordenado al Perú realizar pagos a favor del inversionista. Sin embargo, en uno de ellos se ordenó el pago de menos de la mitad del monto originalmente reclamado y en los otros dos, se ordenó aproximadamente el 4% de las pretensiones iniciales.
De los aproximadamente US$50.000 millones demandados al Estado en los casos finalizados, solo se ha reconocido a favor de los inversionistas aproximadamente US$43 millones.
Es decir, el Estado solo ha sido condenado a un 0,086% de los reclamos que ha enfrentado en CIADI y ha recibido decisiones a su favor de un total de más del doble del monto que ha pagado como indemnizaciones.