El ministro de Economía y Finanzas, Waldo Mendoza, consideró que si bien algunos capítulos de la Constitución Política necesitan ser cambiados, la parte económica está “básicamente bien”.
En RPP Noticias, señaló que en el capítulo económico hay varios puntos que no cambiaría, como por ejemplo la prohibición de que el Banco Central le preste al Ministerio de Economía y Finanzas (MEF).
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“En los 80 el ministro de Economía no tenía plata, levantaba el teléfono, llamaba al presidente del Banco Central y le pedía 500 mil soles, el Banco Central fabricaba soles, le prestaba plata y generaba grandes problemas. ¿Queremos eliminar ese capítulo?”, expresó.
Mendoza también cuestionó que desde el Congreso se pretenda crear una aerolínea de bandera, cuando todas las líneas aéreas han quebrado en el mundo debido a la pandemia del coronavirus (COVID-19).
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“Otro capítulo es de los contratos. La idea es que si yo soy un inquilino y hago un contrato con el propietario de la casa, ese contrato entre privados no puede ser eliminado por ley”, manifestó.
“Creo que explicando, discutiendo, entendiendo, encontraremos que hay algunos capítulos necesitan ser cambiados, pero en la parte económica yo digo que está básicamente bien”, añadió.
En ese sentido, el titular del MEF consideró que existe un “fetichismo exagerado” con respecto a la Constitución y recalcó que la promulgación de una nueva Carta Magna no va a solucionar todos los problemas del país.
“Los que dicen que la Constitución es buenísima, nos dicen que todo lo que ha pasado en el Perú en los últimos 30 años se debe a la Constitución. En rigor el desempeño macroeconómico de un país depende del modelo de desarrollo que nos da la Constitución, de las políticas macroeconómicas y de la situación internacional”, acotó.
“Los de acá creen que cambiando la Constitución se resuelve todo. Por ejemplo los vecinos del sur van a cambiar su Constitución pensando que las pensiones van a ser mejores y la Constitución no tiene absolutamente nada que ver con eso. Hay un fetichismo exagerado”, sentenció.
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