¿Por qué es importante tener salud mental antes de formar familia?
¿Por qué es importante tener salud mental antes de formar familia?
Edimar Vargas

El amor propio y el trabajar en nuestro propio contribuye a la construcción de relaciones de pareja y familiares saludables. “Como toda construcción se necesita primero una base. La base primordial para eso es el amor propio, la confianza en uno mismo. La persona tiene que estar emocionalmente saludable, quererse, amarse y respetarse así mismo para, entonces, iniciar una relación saludable, que no caiga en una codependencia emocional”, sostuvo el psicólogo David Alcalá Pérez, en el portal Esmental.com.

Para el psicólogo, una relación de pareja saludable es una donde las dos personas se sientan en sintonía y armonía para compartir su vida y donde se sientan cómodos y libres de poder expresar sus emociones y sentimientos sin ser juzgados por la otra persona.

Pero ¿qué sucede cuando uno de los dos o ambos sufren de trastornos psicológicos?

Las enfermedades mentales afectan muchos aspectos de la vida, incluidas las relaciones de pareja. Muchos pueden tener temor de revelar a su pareja el trastorno que sufren debido al estigma que lo rodea, pero para estos casos la comunicación es clave pues los comportamientos atípicos pueden causar confusión en la pareja. “A veces tenemos nuestro propio estigma asociado con revelar nuestras luchas de salud mental. Dudamos en compartir con nuestro socio por temor a alejarlos “, dice Tory Miller, Gerente de Programas Clínicos de Diversus Health. “Sin embargo, una relación sana necesita confianza y comunicación. Es posible que no se revele de inmediato, pero es algo a considerar si desea llevar la relación con esa persona al siguiente nivel“.

Los trastornos mentales pueden afectar diversos aspectos de la relación con la pareja y los otros miembros de la familia. “A veces, nuestros síntomas de salud mental pueden hacernos sentir letárgicos, afectar nuestra capacidad para expresar empatía o causar sentimientos de ansiedad y aislamiento. A veces, estos síntomas pueden causar codependencia o incluso resentimiento” advierte la psicóloga. Al respecto, recomienda conversar abiertamente sobre el tema pata poder mejorar las necesidades durante los episodios agudos, establecer límites y pedir ayuda.

Las enfermedades mentales de los padres también representan un riesgo para los hijos en la familia quienes están más expuestos a desarrollar enfermedades mentales frente a sus pares. Según la American Academy of Child & Adolescent Psychiatry, el riesgo es particularmente grave cuando los padres sufren de desorden bipolar, un desorden de ansiedad, “ADHD”, esquizofrenia, el alcoholismo, abuso de otras drogas o depresión ya que el riesgo puede ser heredado genéticamente.

No obstante, un ambiente familiar inconsistente e impredecible también contribuye a la enfermedad mental en los hijos. Cuando los padres sufren trastornos mentales, el entorno familiar puede tornarse inestable y el vínculo afectivo con sus hijos puede ser muy débil lo que impacta fuertemente a la maduración cerebral y el desarrollo de la personalidad de los pequeños.

¿Cuáles son las consecuencias?

Según la American Academy of Child & Adolescent Psychiatry , esto se debe a que los trastornos mentales reducen la empatía, la sensibilidad emocional y la capacidad para percibir señales del niño, reduciéndose la interacción filial que se requiere. Estas carencias y la percepción de un entorno inseguro exponen al pequeño al desarrollo de problemas conductuales, emocionales y sociales a corto y a largo plazo. “Estudios han revelado, por ejemplo, que alrededor del 61% de los hijos de padres con depresión mayor desarrollan una enfermedad mental a lo largo de su infancia y adolescencia. Además, investigaciones demuestran que la mayoría de los trastornos mentales en la edad adulta se manifiestan en la infancia o en la adolescencia, antes de los 14 años”, se expone en el portal.

En ese orden de ideas, resulta importantísimo tratar y conversar con la pareja acerca de estos trastornos o desórdenes mentales antes de iniciar una familia para poder encontrar juntos formas de abordarlo y evitar que terminen por afectar a los futuros hijos. La tarea será mejor orientada si estas conversaciones son guiadas por un profesional en psicología.

Si ya forma parte de una familia, es urgente que identifique la presencia de algunos desordenes tanto en la pareja como en los niños para empezar a tratarlos a una edad temprana y contenerlos.

Las enfermedades mentales representan un claro riesgo para la pareja y en especial para los niños. Los padres deben reconocer la importancia de su bienestar mental pues tienen una influencia significativa en el desarrollo de su personalidad, sensibilidad emocional y en la adquisición de hábitos y comportamientos saludables.

¿Cómo preparar mi salud mental antes de tener familia?

Frente a ello, Mariana Guevara, coordinadora de bienestar de Pacíficos Seguros EPS, destaca algunas recomendaciones:

Reposa tu mente

“Mientras esté tratando de quedar embarazada, intente relajarse y estar lo más libre posible del estrés. Pregúntele al médico respecto a técnicas para reducir el estrés. Duerma bien y suficiente y tómese un tiempo para relajarse”, comenta.

Plan de acción

Elabora un plan de vida reproductiva, el cual es usado tanto si quieres o no quieres quedar embarazada. En este caso, plantéate y evalúa todo el abanico de opciones que tienes a la mano para conseguir un embarazo eficaz y acorde.

Manténganse mentalmente sana

“La salud mental tiene que ver con la manera en que la gente piensa, siente y actúa al enfrentar la vida. Para lograr su mayor bienestar, usted necesita valorarse y estar satisfecha con su vida. Todas las personas se sienten en ocasiones preocupadas, angustiadas, tristes o estresadas. Sin embargo, si estos sentimientos no se van e interfieren con su vida cotidiana, busque ayuda. Hable con su médico u otro profesional de la salud acerca de sus sentimientos y las opciones de tratamiento”, comenta

Revisa tu estilo de vida

“Tu estilo de vida puede tener un gran impacto sobre tu embarazo. Evitar el consumo de drogas y alcohol, hacer ejercicio y tener una alimentación saludable ayudan a que tú y el futuro bebé se mantengan sanos”, agrega.

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