Bellavista: la cobarde agresión de un padre a su hijo [VIDEO]

Las imágenes son indignantes y duelen. En ellas se ve como un sujeto completamente fuera de sí jalonea a un niño, lo levanta del cabello y lo tira contra el suelo. Luego lo vuelve a levantar del cuello y lo tira contra un lavadero en donde hay un caño abierto. El sujeto lo mete de cabeza en el agua y por un instante parece que quisiera ahogarlo. En medio de la agresión se escucha la voz del pequeño: “Disculpa, papá”. Sí, el cobarde que samaquea al niño como si fuera un muñeco es su padre.

El video difundido por ATV + fue grabado por uno de los vecinos del sujeto. Cuadro por cuadro, segundo a segundo las imágenes erizan la piel e indignan. El agresor fue identificado como José Luis Minaya Janampa, un empresario de transporte. Vive en Bellavista, Callao, junto a su pareja y otros tres hijos. El pequeño víctima de los abusos es un hijo de un compromiso anterior.

En el video se ve como el pequeño es brutalmente violentado mientras que el padre acompaña cada jaloneo, cada empujón con amenazas. “¿Me vas  a hacer caso?”, le dice el sujeto. En medio del llanto, atropellado por las lágrimas, el niño responde “Sí, papá. Discúlpame”.

En el video también aparece la pareja de Minaya Janampa quien intenta detenerlo y decirle que pare, que ya fue suficiente, pero el hombre continúa cegado. 

ATV+ visitó la casa del sujeto y fue su pareja, visiblemente sorprendida, quien atiende a la reportera. No puede ni siquiera ensayar una explicación. No la hay. En medio de la entrevista aparece el menor agredido y ahí se pueden ver las marcas de las agresiones en diferentes partes del cuerpo. Un testimonio más confirma los maltratos. Otra niña, al parecer otra hija de Minaya Janampa, dice. “Mi papá le pegó”.

Los vecinos han dicho que con frecuencia se escuchan gritos de los niños siendo golpeados e insultos de parte del sujeto. En declaraciones a ATV+, el sujeto acepta que es el de las imágenes, aunque en un principio niega las agresiones diciendo que lo bañaba en su jacuzzi, luego las acepta con total cinismo. “Yo lo corrijo pero no me hace caso”, dice. Luego agrega una pregunta a la reportera, una pregunta que podría ser premonitoria para él. “¿Ahora qué quiere que haga? ¿Qué me vaya preso?”.