“Tengo 15 años alquilando en Lima y lamentablemente necesitamos tener una propiedad”. Esta fue la justificación de uno de los invasores que esta madrugada intentaron tomar posesión de un terreno ubicado a la espalda del penal de Lurigancho.
Once familias llegaron con sus pertenencias y a fin de instalarse en la zona asegurando que habían conversado previamente con el alcalde de San Juan de Lurigancho, Juan Navarro Jiménez, para que les ceda el terreno.
Sin embargo, al no poder acreditar la propiedad, la Policía Nacional procedió con el retiro de los invasores ante la llamada de alerta de los vecinos del asentamiento humano Nueva Esperanza, que colinda con el centro penitenciario.
Según un dirigente vecinal, el terreno está destinado para la creación de áreas verdes.
Patrimonio cultural en riesgo: 42 zonas pueden ser invadidas http://t.co/pCwG4EM7F0 pic.twitter.com/SnMOvgF6Vd— Sociedad El Comercio (@sociedad_ECpe) junio 3, 2015
El operativo se realizó con la participación de 50 efectivos policiales y los invasores aceptaron retirarse de manera pacífica.
El 19 de mayo pasado, cientos de invasores se enfrentaron a la Policía Nacional en su intento por ocupar ilegalmente la zona arqueológica e intangible en Tablada de Lurín. Una semana después, otro grupo de personas quiso apropiarse de zonas del Morro Solar de Chorrillos, declarado Patrimonio Histórico por haber sido escenario de la Batalla de San Juan y Chorrillos en marco de la Guerra del Pacífico.