Chico Buarque, del pentagrama a la novela
Chico Buarque, del pentagrama a la novela
Santiago Bullard

Por lo general, hablar de Chico Buarque es invocar la figura de uno de los cantautores brasileños más importantes. Discípulo y buen amigo de figuras como Tom Jobim y Vinicius de Moraes (quienes compusieron, entre muchos otros clásicos de la canción carioca, “Chega de saudade”), él escribió un capítulo propio en la historia de la música de su país a partir de mediados de la década del sesenta. Menos conocida, en cambio, es su faceta como escritor. 

Su más reciente novela, titulada “El hermano alemán”, se publicó este año en Brasil. No tuvo que pasar mucho tiempo para que apareciera, traducida, en las librerías de España. De acuerdo con representantes del  grupo editorial Penguin Random House Perú, se espera que el libro salga a la venta en nuestro país en agosto.

DESENTERRAR EL PASADO
Aunque el tema de fondo de “El hermano alemán” está tomado de la vida de su autor, el desarrollo de la trama ha echado mano de la ficción. Todo empieza cuando el protagonista, Ciccio (que, obviamente, alude a Chico), descubre un viejo sobre entre las páginas de uno de los libros de su padre, ya fallecido. Dentro hay una carta, fechada en Berlín el 21 de diciembre de 1931, en la que se alude a un hijo que su padre habría tenido durante un viaje a Alemania.

La novela, pues, es un relato que busca recuperar la imagen de este hermano desconocido, remoto como una sombra. De paso, sirve a su autor para dar un testimonio más sobre su propia y agitada vida, desde los años de pandillaje juvenil hasta los tiempos de la dictadura militar que gobernó a Brasil entre 1964 y 1985. 

Los límites entre la realidad y la ficción se tornan difusos en estas páginas. Chico Buarque y su álter ego literario tienen mucho en común: un padre historiador, una historia difícil con la dictadura militar y, sobre todo, un hermano alemán al que nunca conocieron. Pero hay, también, importantes diferencias.

De acuerdo con declaraciones del propio Buarque, él se enteró de la existencia de este hermano desconocido en 1967, por un comentario que hizo el poeta Manoel Bandeira, quien había sido gran amigo de su padre. 

Para la redacción de este libro, Buarque contó con el apoyo de dos historiadores, quienes lo ayudaron a rastrearlo. Aparentemente, tenía un parecido casi estremecedor con su padre. Y, como él mismo, era cantante. “Cuando oí un disco suyo –comentó en una entrevista–, me di cuenta de que tenía la voz grave de mi padre”.  

ESCRITOR DE VIEJA ESCUELA
Aunque menos conocido por su faceta como narrador, Chico Buarque empezó a escribir en los años 60. Su primer libro, “A banda”, apareció en 1966, y pasarían ocho años hasta la publicación del segundo: “Fazenda modelo”.

En total, Buarque es autor de nueve libros, que hablan de una vocación literaria paralela a la musical. Pero, con el paso de los años, parece haberse volcado cada vez más en el ejercicio de la prosa. Resta, además, sumar a estas publicaciones las seis obras de teatro que ha escrito. La primera de ellas, “Roda viva”, data de 1967.  

Con la llegada de “El hermano alemán” a las librerías peruanas, se abre ante nosotros la oportunidad de conocer a uno de los mayores artistas de Latinoamérica desde un ángulo diferente, pero con su misma voz.

MÁS INFORMACIÓN
"El hermano alemán".
Página: 237.
Editorial: Obra fue publicada en el 2014 por Companhia Das Letras.

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