ADRIANA GARAVITO (@adrigaravito1)
Enviada especial a Medellín
¿Qué pasa si una Feria tan importante como Colombiamoda se juega todo por los talentos jóvenes? La respuesta no es tan complicada: la competencia crece, con esta el esfuerzo y con este las ganas de ser mejor. Este concepto suena muy básico. De hecho lo es, pues apoyar a jóvenes talentos en la rama que se especialicen (no solo moda) siempre es una buena estrategia.
Sin embargo, ejecutarla no es tan simple. Al menos no cuando se está hablando de pasarelas, pues hay una serie de obstáculos en el camino a un nuevo talento. Primero hay que luchar con las marcas reconocidas a nivel mundial que son casi imbatibles: Dior, Versace, Balenciaga, Jean Paul Gaultier y más. Estas están impregnadas en el consumidor de lujo, en los aficionados a la moda y hasta en los que dicen no saber mucho de la industria. ¿La razón de su éxito? Existen diversas variantes, pero más que nada tiene que ver con el tiempo que tienen en la industria, la conceptualización que le dan a sus colecciones y, por supuesto, con la renovación. Por poner un ejemplo: hace poco Louis Vuitton anunció el cambio de su director creativo. Así, Marc Jacobs le dio la posta a Nicolas Ghesquiére. Esto sucede con todos: sin cambios se estancan.
Luego, los nuevos talentos tienen que hacerse un espacio entre los diseñadores conocidos en su país. Esta -claro está- es una tarea un poco más fácil, pero no quiere decir que se logra de manera inmediata.
Por último, existe la competencia entre ellos. La cantidad de diseñadores independientes cada vez es más grande. Esto es gracias, en parte, a Internet. Ya no es obligatorio tener una tienda para dar a conocer su trabajo. Con mover bien las redes sociales puede ser suficiente para arrancar una carrera.
¿DÓNDE QUEDAN?
Ahora, no hay diseñador reconocido que no haya sido joven. Así que estos obstáculos no son difíciles de sobreponer. Sin embargo, es necesario que plataformas importantes los busquen, los encuentren, confíen en ellos y los presenten ante los peores críticos: los potenciales clientes.
Este empujón puede hacer mucho por ellos. En Colombia, el caso del que más se habla es el de Camilo Álvarez, quien hace una década debutó en la pasarela Jóvenes Talentos y este año se encargó del desfile de apertura. “A él lo consideramos como el hijo de Colombiamoda”, le dijo Carlos Eduardo Botero, presidente ejecutivo de Inexmoda a El Comercio. “Él es un claro ejemplo de que si nos tomamos el tiempo de observar lo que hacen tantos jóvenes en la moda y se les da la oportunidad, la pueden aprovechar al máximo. Camilo no solo ha abierto esta pasarela, sino que su éxito en el país es grande”.
APOYO TOTAL
Es por esto que durante los dos últimos días de Colombiamoda, los primeros desfiles han sido dedicados a jóvenes creadores en la pasarela Non Stop. Y aquí de nuevo la pregunta: ¿qué sucede cuándo una plataforma apuesta todo por ellos?: ellos sorprenden.
Andrés Pajón, Lía Samantha y la marca 747 son los que mejor impresión dejaron. El primero por la delicadez de su trabajo y su afición por los detalles. La segunda por su originalidad para crear prendas inspiradas en la cultura africana y la marca por su creatividad: la pasarela, en realidad, fue una pista de baile. Al terminar, recibieron aplausos de pie.