En una noche con grandes estrellas por todas partes, la cantante de pop consiguió acaparar la atención y conquistar la alfombra roja de la Gala del Met cuando apareció ataviada con una gran capa amarilla con ribetes de piel y bordados florales dorados, y una cola tan larga que requería tres asistentes.
El traje incluía un pequeño mini vestido rosa debajo y una brillante tiara. En línea con el tema de la noche —China, y su influencia artística en Occidente— el traje estaba diseñado por la modista de Beijing Guo Pei, que también tiene algunos de sus suntuosos diseños en la exposición actual del Met "China: Through the Looking Glass" ("China: A través del catalejo") que inspiró la gala.
Como corresponde a una estrella —o a la realeza de la moda— Rihanna reclamó una atención especial en la alfombra siendo una de las últimas en llegar.
Su paso por la alfombra roja despertó todo tipo de comentarios y, por supuesto, los memes no se hicieron de esperar.