
Desde que comenzaron su proyecto familiar hace cinco años, Evaluna y Camilo han tenido claro que, a pesar de sus carreras, siempre estarían juntos. Por eso iniciaron giras conjuntas, donde pueden presentar su música y pasar tiempo en familia. Con la llegada de sus hijas, Índigo y Amaranto, esta idea se mantuvo, integrándolas al staff de sus tours y pensando en todo, incluso en mantener a Índigo al día en la escuela.
Hoy en día, su rutina como artistas incluye también su faceta como padres. Y aunque muchos podrían pensar que criar a una niña en medio de conciertos, viajes y ensayos puede ser caótico, Evaluna y Camilo han encontrado una fórmula que les funciona. ¿La clave? Una maestra particular que acompaña a la familia durante toda la gira.
La escuelita en el tour
Durante uno de sus tradicionales videos de los lunes en su canal de YouTube, titulado “12 horas antes del show”, la pareja mostró cómo es un día típico en plena gira, esta vez en Chihuahua, México. Entre ensayos, desayunos en familia y momentos íntimos, los seguidores pudieron ver por primera vez cómo han organizado la rutina académica de Índigo, su hija mayor.

Después de compartir el desayuno con sus padres y su hermanita, Indi, como le dicen de cariño, se prepara para asistir a su “escuelita”, un espacio que, aunque lejos de ser tradicional, ha sido diseñado para mantenerla al corriente con sus estudios. Evaluna le pregunta: “¿A dónde vamos?” y la pequeña, con entusiasmo, responde: “¡A mi escuela!”
Para lograr que Índigo no se atrase con sus actividades escolares, Evaluna y Camilo llevan en cada tour a Bibi, una maestra particular que se encarga de enseñarle a la pequeña todos los días, de lunes a viernes.
La dinámica es sencilla pero poderosa: cada mañana, después del desayuno, Evaluna lleva a su hija con Bibi, quien se hospeda en el mismo hotel que la familia. Las clases se desarrollan en un ambiente tranquilo, mientras sus papás ensayan o se ejercitan.

“Indi está haciendo escuelita. Nos trajimos a Bibi, su profe de gira y todos los días hace un ratito de escuela”, explicó Evaluna, mostrando cómo han priorizado que la niña mantenga una rutina parecida a la que tendría en casa. Incluso mencionó que aprovecha ese rato para ir al gimnasio, mientras Camilo también se une a la rutina de ejercicios.
Una vez que Índigo termina sus clases, la familia vuelve a reunirse para compartir tiempo de calidad antes del show. Camilo mencionó que suelen disfrutar al menos 15 minutos bajo el sol juntos, una pausa necesaria en medio del ajetreo del tour. Después, llega la hora del baño, la comida y, claro, la siesta, un ritual infaltable en su rutina.













