La Niña está a la vuelta de la esquina, aunque no tan cerca como en un inicio se esperaba, y el Centro de Predicción Climática de Estados Unidos le sigue el rastro. La entidad adscrita a la Oficina Nacional de Administración Oceánica y Atmosférica (NOAA, por sus siglas en inglés) ha emitido un nuevo reporte con el estatus del fenómeno que afecta a todo el clima del planeta.
Ya en mayo, la NOAA advertía que La Niña estaba en camino y que supondría una mala noticia para la temporada de huracanes en Estados., pues amenazaba con llegar en julio. En su más reciente informe del jueves 11 de julio, explica que ENSO está todavía en condición neutral y La Niña se retrasa.
¿Qué es ENSO?
El Niño-Oscilación del Sur (ENSO o ENOS) es un patrón climático que, tal y como su nombre indica, consiste en la oscilación de los parámetros meteorológicos de la zona ecuatorial del Océano Pacífico. El ENSO tiene dos fases opuestas: El Niño y La Niña.
En el caso de El Niño, existe un calentamiento del Pacífico, mientras que La Niña es la fase de enfriamiento. Entre ambos fenómenos se desarrolla una fase neutral, que es en la que nos encontramos actualmente.
La Niña: 70% de probabilidades de desarrollarse en agosto-octubre
Después del fin de El Niño 2023, el ENSO se encuentra neutral y estas condiciones se espera que se mantengan durante las próximas semanas. Sin embargo, se calcula que hay un 70% de posibilidades de que La Niña emerja entre agosto y octubre próximo, y que persista en el invierno del hemisferio norte.
Las mayores probabilidades, no obstante, apuntan a fin de año: hay un 79% de probabilidades de que La Niña se desarrolle entre noviembre y enero.