
En la cocina, el cuchillo es rey, pero las tijeras de cocina tienen lo suyo. Más resistentes que las tijeras comunes, estas herramientas pueden cortar carne, verduras, hierbas y hasta cartón de manera rápida y limpia. Nos ayudan a cocinar sin ensuciar tanto y, en muchos casos, se convierten en salvavidas cuando hay que improvisar.
No obstante, algunas tijeras de cocina esconden un detalle que muchos pasan por alto: justo donde se unen las dos mitades, debajo de las hojas, hay una sección dentada. Son dos pequeños semicírculos de metal con textura rugosa que encajan como si estuvieran diseñados para sujetar algo. La mayoría desconoce su función, pero en realidad tiene más usos de los que te imaginas.
Para empezar, puede funcionar como cascanueces. Sí, aunque no es su función principal, esos dientes metálicos son lo bastante resistentes como para romper cáscaras duras si no tienes un utensilio específico a mano. Eso sí, conviene hacerlo con cuidado para no dañar el mecanismo de las tijeras.

También sirven para abrir botellas o pequeños tarros. Esos frascos de especias que vienen demasiado apretados, o las botellas de vinagre con tapa roscada que no ceden, se abren fácilmente si los sujetas con esa parte dentada. Incluso ayuda a girar tapas de plástico que parecen soldadas.
Y hay más: si usas acelgas, apio o cualquier verdura de tallo largo, esta parte de las tijeras puede ayudarte a quitar hojas o separar tallos con un simple movimiento. Solo pasas el tallo por los dientes metálicos y tiras. Listo. Rápido y sin cuchillos.

Por último, no olvides cuidar tus tijeras. Afílalas cada cierto tiempo y lubrica el engranaje con unas gotas de aceite. Así estarán siempre listas para cortar… y para mucho más.
Cuál es la función de las tijeras de cocina
Las tijeras de cocina están diseñadas específicamente para facilitar tareas culinarias que van más allá de lo que unas tijeras comunes pueden hacer.
Su función principal es cortar alimentos de forma rápida, precisa y segura, ya sea carne, hierbas, verduras o incluso empaques.
Gracias a su diseño robusto y sus hojas afiladas, permiten trabajar con menos esfuerzo y ensuciar menos utensilios, convirtiéndose en una herramienta esencial en cualquier cocina.

Periodista. Estudió Comunicación en la Universidad de Lima. Diez años de experiencia en medios digitales. Actualmente se desempeña como redactor del Núcleo de Audiencias de El Comercio.