
Desde que Donald Trump asumió nuevamente el control de la Casa Blanca, se han anunciado varias políticas migratorias que buscan cambiar el rumbo de la inmigración irregular en Estados Unidos. Una de las medidas más destacadas es el impulso a la autodeportación, una alternativa que ha generado bastante conversación y opiniones divididas. Esta opción, que está siendo promovida por el gobierno actual, permite a los migrantes notificar su salida del país de manera voluntaria, en lugar de enfrentarse a una deportación forzosa. Si bien puede sonar complicado y algo arriesgado, se argumenta que esta medida tiene ciertos beneficios tanto para los migrantes como para el sistema migratorio estadounidense.
A través de la nueva aplicación CBP Home, los migrantes indocumentados ahora tienen una herramienta oficial para comunicar sus planes de salir de Estados Unidos de manera voluntaria. Esta plataforma reemplaza la CBP One, que estuvo en uso durante la administración de Joe Biden, y según el gobierno de Trump, la autodeportación es la mejor opción para aquellos que no quieren seguir enfrentando un proceso legal largo y costoso. Vamos a desglosar los beneficios principales que, según las autoridades de Trump, ofrece esta política.

LOS BENEFICIOS PARA LOS QUE OPTEN POR LA AUTODEPORTACIÓN
1. Una opción más económica y menos costosa
Uno de los principales beneficios de la autodeportación es el ahorro de recursos. Los procesos de deportación forzosa pueden ser increíblemente costosos para el sistema migratorio de Estados Unidos, tanto en términos de dinero como de tiempo. Las deportaciones forzadas implican largas batallas legales, detenciones y el uso de numerosos recursos por parte de agencias como la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) y el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE). Al elegir salir voluntariamente, los migrantes evitan todos esos gastos, lo que también libera recursos para que el gobierno pueda centrarse en otros casos, como los inmigrantes con antecedentes criminales.
2. Más seguro para los migrantes
La autodeportación, según el gobierno de Trump, es una opción más segura que ser deportado por la fuerza. La deportación forzosa suele ser un proceso angustiante, que incluye arrestos y traslados a centros de detención antes de ser enviados al país de origen. Esta situación puede poner en riesgo tanto la seguridad como el bienestar de los migrantes. Optar por la salida voluntaria les permite tener un mayor control sobre su proceso, evitando posibles situaciones de abuso o trato cruel durante una deportación obligatoria.
3. Recursos concentrados en casos de inmigrantes con antecedentes criminales
Una de las grandes ventajas de la autodeportación, que subraya el Departamento de Seguridad Nacional, es que permite una distribución más eficiente de los recursos. Al permitir que los migrantes se vayan por su cuenta, las agencias migratorias pueden concentrarse en aquellos casos que realmente representan un riesgo para la seguridad nacional, como los inmigrantes con antecedentes criminales. Este enfoque, argumenta el gobierno, optimiza los esfuerzos y permite que se prioricen los casos más graves, mientras que los migrantes sin antecedentes criminales pueden salir del país sin tener que enfrentarse a procesos largos y complicados.
4. Oportunidad de regresar legalmente en el futuro
Una de las promesas más atractivas que el gobierno de Trump ha hecho respecto a la autodeportación es la posibilidad de regresar legalmente a Estados Unidos en el futuro. De acuerdo con la administración, aquellos migrantes que elijan dicha salida voluntaria y salgan del país voluntariamente podrían tener la oportunidad de regresar en el futuro a través de vías legales. Esto ofrece una segunda oportunidad para aquellos que quieren vivir y trabajar en Estados Unidos, pero que no cumplen con los requisitos legales actuales. Esta es, sin duda, una ventaja importante para quienes desean mantener la posibilidad de un regreso dentro del marco de la ley.
5. Recuperación de la integridad del sistema migratorio
La administración de Trump ha dejado claro que la autodeportación es parte de un esfuerzo más amplio para “recuperar la integridad del sistema migratorio”. Según Kristi Noem, secretaria del Departamento de Seguridad Nacional, la administración de Biden abusó de plataformas como CBP One, permitiendo la entrada de más de un millón de inmigrantes de manera irregular. Trump y su equipo argumentan que, al permitir que los migrantes se autodeporten, se restablece el control y la justicia en el sistema migratorio, y se evita que las políticas actuales permitan una entrada masiva e irregular al país.
6. Menos presión sobre el sistema de inmigración
Otro beneficio destacado es la disminución de la presión sobre el sistema migratorio. Al permitir que los migrantes se vayan voluntariamente, se reduce el número de personas que deben ser procesadas a través de los canales de inmigración, lo que alivia la carga de trabajo de las autoridades y permite una gestión más eficiente de los casos. Esto es especialmente relevante en un sistema que ha estado sobrecargado durante años, y que con frecuencia enfrenta demoras significativas en la resolución de casos de inmigración.
7. Flexibilidad y control para los migrantes
La autodeportación otorga a los migrantes la capacidad de tomar el control de su propio destino. En lugar de enfrentarse a la incertidumbre de una deportación, que podría ocurrir de manera repentina y sin aviso, la salida voluntaria les permite planificar con más tranquilidad y preparar su regreso a su país de origen de una forma más ordenada. Además, la aplicación CBP Home facilita este proceso, permitiendo que los migrantes comuniquen su salida de forma oficial, lo cual les da mayor transparencia y seguridad en todo el proceso.
8. Una medida para evitar la persecusión futura
Finalmente, la autodeportación ofrece a los migrantes una salida limpia del país, sin la marca de una deportación forzosa que podría afectarles permanentemente. Si bien no es una garantía absoluta, el gobierno de Trump ha señalado que quienes opten por esta salida podrían evitar las consecuencias a largo plazo que suelen asociarse con una deportación forzosa, como ser catalogados como “inadmisibles” para futuros intentos de reingreso. En este sentido, parece ofrecer un “cierre” menos traumático y más manejable para quienes deciden tomar esta ruta.











