En un giro que ha sorprendido a consumidores y defensores de los derechos de los usuarios, Walmart ha reactivado en 2025 la controvertida “tarifa del carrito” para pedidos en línea de entrega o recogida que no alcanzan los US$35. Esta medida, que suma US$6.99 a cada compra por debajo del umbral, ha generado un aluvión de críticas por su impacto en las familias de bajos ingresos, especialmente en quienes dependen de la asistencia gubernamental.
¿A QUIÉNES AFECTA MÁS ESTA MEDIDA DE WALMART?
La tarifa, que había sido suspendida durante la pandemia como medida de apoyo, ahora vuelve con más fuerza que nunca. Según Walmart, el objetivo es cubrir los costos logísticos derivados de procesar pedidos más pequeños: personal que selecciona, empaca y entrega, un proceso que resulta más caro que enviar los productos desde centros de distribución especializados. Sin embargo, para los más necesitados, esta justificación empresarial suena a poco consuelo.
Los beneficiarios de distintos programas de ayuda de alimentos son quienes se ven más afectados por esta política de Walmart (Foto: AFP)
Los beneficiarios de programas como SNAP/EBT, Medicaid y WIC, precisamente aquellos a quienes el programa Walmart+ Assist busca ayudar, son los más afectados por esta decisión. Estas familias, que suelen realizar compras pequeñas y frecuentes debido a sus limitaciones presupuestarias, ahora se ven obligadas a pagar un cargo adicional o reorganizar por completo su forma de abastecerse.
La reactivación de la “tarifa del carrito” no es solo un ajuste logístico: es también un reflejo de las presiones económicas que enfrenta la empresa en un año especialmente difícil para el consumo. Con la inflación afectando a millones de hogares estadounidenses, Walmart ha argumentado que necesita equilibrar sus costos de operación y compensar los gastos de manipular pedidos menores. El problema es que esa búsqueda de equilibrio termina afectando a quienes más dependen de cada dólar.
Esta medida genera especial preocupación entre defensores de consumidores y organizaciones sociales (Foto: Walmart)
OPINIONES EN CONTRA DE LA DECISIÓN DE WALMART
Organizaciones sociales y expertos en derechos del consumidor no tardaron en alzar la voz. Denuncian que esta política castiga a las familias con menos recursos, quienes por falta de almacenamiento o restricciones de beneficios no pueden comprar grandes cantidades en una sola transacción. La necesidad de productos frescos y la logística diaria de la vida real convierten en un lujo la idea de agrupar compras de US$35 o más.
ESTRATEGIAS PARA EVITAR PAGAR LA TARIFA DEL CARRITO
Frente a este panorama, los asesores en finanzas personales ofrecen algunas alternativas para sortear el cargo adicional. Recomiendan agrupar las compras semanalmente o quincenalmente, compartir pedidos con vecinos o familiares y priorizar las visitas presenciales a las tiendas para evitar la tarifa. No obstante, estas soluciones, aunque útiles, no siempre son viables para las familias con movilidad limitada o tiempo escaso.
Aunque Walmart ofrece la membresía Walmart+ Assist a mitad de precio para los beneficiarios de programas de asistencia —US$6.47 mensuales o US$49 anuales— la tarifa del carrito sigue vigente para pedidos pequeños, un detalle que muchos consideran injusto. La empresa insiste en que la medida busca sostener la viabilidad de su servicio de entregas y su compromiso con la calidad, pero para muchos clientes, este argumento queda eclipsado por la realidad de sus presupuestos ajustados.
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