Nahuel Guzmán quedó a un paso de cumplir su sueño. Tras haber sido parte del plantel de la selección argentina en los últimos cuatro años, incluso en la última gira por Europa, Jorge Sampaoli lo dejó fuera de los 23 futbolistas de la selección argentina para el Mundial Rusia 2018 e incluyó en su lugar a Franco Armani, de buen presente en River, quien ni siquiera había sido convocado. Si bien el arquero de Tigres de México aún no se expresó públicamente, su padre, el dibujante Jorge Guzmán, cuestionó la decisión del DT con una caricatura, en la que sugiere que el DT es funcional a los medios de comunicación, y con un texto titulado “De espalda al sueño”, publicado en su cuenta de Facebook.
La caricatura muestra varios elementos que cuestionan la actitud del entrenador: tiene un careta, el escudo de Chile y tatuajes de los medios de comunicación más populares: TyC Sports, Fox Sports y TNT. "Es muy natural en un sueño ver gente de espaldas al sueño (...). El primer error de esta gente era entrar disfrazados. En un sueño nadie engaña a nadie a menos que todos acuerden jugar a eso, entonces se puede escribir con el codo lo que luego se borrará con la mano (típico y raro ardid en los sueños), se puede sin temor al ridículo, levantar humeantes monumentos que serán la delicia de soñantes poco exigentes y en este orden de cosas se puede incluso afirmar que se cambiará la suerte de un barco sin rumbo", dicen los primeros pasajes del texto, que hace referencia, sin mencionarlo, a la exclusión de su hijo de la próxima Copa del Mundo.
El descargo completo del padre del Patón Guzmán
"De espalda al sueño
Es muy natural en un sueño ver gente de espaldas al sueño. Al principio creí que era gente despierta o gente que no quería estar allí, pero entendí que solo se trataba de gente buscando erróneamente una forma de entrar a ese mundo extraño y cierto. El primer error de esta gente era entrar disfrazados. En un sueño nadie engaña a nadie a menos que todos acuerden jugar a eso, entonces se puede escribir con el codo lo que luego se borrará con la mano (típico y raro ardid en los sueños), se puede sin temor al ridículo, levantar humeantes monumentos que serán la delicia de soñantes poco exigentes y en este orden de cosas se puede incluso afirmar que se cambiará la suerte de un barco sin rumbo. -Soñar no cuesta nada. Dice un despierto con berretín de soñador desconociendo el precio.
El requisito para habitar en ese mundo extraño y cierto de los sueños es estar convencido de que la vigilia es una cárcel, la peor que se pueda imaginar y entonces hay que elegir y elegir es el precio.
El sueño es el potrero de la vigilia, es donde se juegan los partidos de verdad, donde se deja el pellejo por los compañeros que tienen la misma camiseta, esa que esconde los huesos, pero donde también nos abrazamos con el rival, con el otro que somos nosotros en el espejo, el sueño es algo que no se pierde pero que se puede extraviar dejándonos al borde de una cama ajena muertos de sed, muertos en vida mi amigo".
El posteo que se adelantó a la designación
Antes de que se confirmara la lista de 23, y seguramente ya con el dato confirmado de que su hijo no estaría en Rusia, Jorge Guzmán había realizado otra publicación en la que, sin mencionarlos, cuestionaba la actualidad de Sergio Romero y Willy Caballero y elogiaba el presente del Patón.
"Soñé que se jugaba una final en Inglaterra y nuestros arqueros estaban en el banco (en el de suplentes), también soñé que otro de nuestros arqueros no dejaba de jugar y salía los últimos 3 años campeón de su liga, que ganaba 2 copas más, que jugaba varias finales internacionales, en fin, el sueño parecía tratarse de logros deportivos en los que cada uno a su manera aportaba con su oficio a un trabajo colectivo. También soñé con periodistas que les costaba ejercer sus rutinas sin verse atravesados por urgencias editoriales a veces parecidas a intereses de naturaleza ambigua", decía el primer texto publicado.
(La Nación)