“Si yo puedo, tú también puedes”, asegura con convicción Adolfo Almarza, un joven de 25 años que retó lo imposible: ser el primer ciclista profesional sin piernas.
El doloroso y perseverante trayecto de Almarza ahora se recompensa con una gran satisfacción personal: “al final pude tener una vida normal, distinta a la que hubiera tenido si me dejaba caer en un hoyo”, cuenta durante una entrevista cedida a CNN en Español.
El joven chileno además de triunfar en el deporte de sus amores, está felizmente casado y tiene una pequeña hija a quien adora.
A los 12 años de edad, regresando de un torneo internacional de básquet, Adolfo Almarza y los compañeros de su equipo tuvieron un terrible accidente automovilístico. Adolfo se llevó la peor parte, perdió las dos piernas.
“Pasé de ser un niño normal a ser un niño con deficiencia”, cuenta el ciclista en uno de los videos que ha realizado para la organización que formó para dar charlas motivacionales. Almarza promueve desde Chile su actitud de hombre decidido, nombre que lleva la entidad.
El deportista no se amilana por nada. Hace dos meses tuvo un accidente que le provocó una fractura en el fémur, esto lo ha alejado de las competencias mientras realiza rehabilitación y retoma fuerzas.
“He aprendido que la perseverancia y la disciplina es la clave”, asegura Almarza quien cumplirá 25 años en febrero.