Buenos Aires (Agencias). A doce días de la patada inicial que inaugure el Mundial Brasil 2014, el comité organizador tiene entre sus principales preocupaciones el ingreso de violentas hinchadas que provoquen disturbios manchando la fiesta futbolítica.
El lanzamiento del denominado "Plan anti hincha violento", es su principal caballito de batalla para evitar que esto ocurra. Impedir el ingreso al país al hincha que tenga antecedentes criminales relacionados al fútbol y el despliegue de un fuerte contingente de seguridad para evitar peleas en sus estadios y alrededores, son sus principales propuestas.
"Hicimos acuerdos a través de la FIFA. El objetivo es impedir que ellos [hinchas violentos] vengan para acá y después, si vienen, que no entren a los estadios", ha dicho la presidenta brasileña Dilma Rousseff.
La hinchada que más preocupa es la de Argentina, quienes registran en su historial un total de 187 víctimas mortales en los últimos 40 años producto de los enfrentamientos entre barras, según informó la ONG Salvemos al Fútbol.
Y estas violentas participaciones no han sido escasas en los mundiales. Fanáticos argentinos protagonizaron incidentes en los torneos de México 1986 y Francia 1998, así como en Sudáfrica 2010, donde muchos de ellos fueron detenidos y expulsados.
Cada estadio estará custiodado por unos 1.800 agentes de seguridad particular, además de 700 efectivos de la fuerza pública. Los recintos, también se verán equipados de rayos X, detectores de metal y cámaras, indicó la agencia AFP.
La policía de Brasil y el comité organizador ha intercambio información de inteligencia con Argentina y el Reino Unido, con el primer país, al ser históricamente su principal rival en las tribunas como en la cancha; y con el segundo por su tradición de barras violentas.