Fabricio Alvarado, candidato del Partido Restauración Nacional (PRN) a la presidencia de Costa Rica. (Foto: EFE/Jeffrey Arguedas)
Fabricio Alvarado, candidato del Partido Restauración Nacional (PRN) a la presidencia de Costa Rica. (Foto: EFE/Jeffrey Arguedas)
Redacción EC

El candidato a la presidencia de del evangélico Partido Restauración Nacional, Fabricio Alvarado, encabezaba los resultados de los comicios presidenciales del domingo, con un 25,19% de los votos, cuando se había escrutado el 68,3% de las mesas electorales.

En el segundo lugar se situaba, el oficialista Carlos Alvarado, del Partido Acción Ciudadana, con un 21,08% de los sufragios; mientras que el empresario Antonio Álvarez Desanti, del Partido Liberación Nacional (PLN), contabilizaba el 19,01% para ocupar el tercer lugar.


Estos son los tres primeros situados de un total de 13 candidatos, pero ninguno se acerca al 40 por ciento necesario para ganar en la primera vuelta, según los primeros resultados del Tribunal Supremo de Elecciones (TSE).

Un total de 3,3 millones de costarricenses estaban convocados este domingo a las urnas para elegir al nuevo presidente de su país, entre 13 candidatos, y los 57 diputados del Congreso para el periodo 2018-2022.

La participación fue, según los primeros datos, del 60,73 por ciento.

El presidente del TSE, Luis Antonio Sobrado, aseguró en una sesión solemne que la jornada electoral transcurrió sin incidentes y que los ciudadanos acudieron a las urnas "ratificando la honda devoción democrática de nuestro pueblo".

Costa Rica también votó este domingo por los 57 diputados de la Asamblea Legislativa.

--- Religión, corrupción y crimen ---

Los primeros costarricenses comenzaron a votar en el exterior en los centros de votación de Australia, China, y otros países asiáticos. Casi 32.000 personas están registradas para votar en 52 consulados.

Fabricio Alvarado se disparó en las encuestas después de aparecer con 3% en diciembre por su postura contraria al matrimonio homosexual, tras una opinión emitida el 9 de enero por la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CorteIDH) a favor de ese tipo de uniones.

Según el Centro de Investigación y Estudios Políticos (CIEP), la opinión de la corte "provocó un shock religioso en el país, lo cual repercutió en la intención de voto del electorado costarricense".

El politólogo Felipe Alpízar, director del CIEP, explicó a la AFP que el apoyo al diputado evangélico se explica por la tendencia conservadora de la sociedad costarricense, que en proporción de dos a uno se posiciona contra temas como el matrimonio homosexual, el uso recreativo de la marihuana y el estado laico.

"Puede ser una cosa coyuntural, no necesariamente se va a mantener en el tiempo, pero (esa tendencia) explica buena parte del crecimiento de (Fabricio) Alvarado", comentó Alpízar.

Antes de la opinión de la CorteIDH, la elección estuvo dominada por el rechazo a la corrupción, provocado por un escándalo con la importación de cemento chino, que reveló una red de tráfico de influencias que alcanzó a los tres poderes del estado.

También la inseguridad motivó la intención de voto de los costarricenses ante un drástico aumento en el número de homicidios, que en 2017 alcanzó 12,1 por cada 100.000 habitantes, el más alto en la historia del país.

Con esos temas en la agenda, el abogado penalista Juan Diego Castro, del minúsculo Partido Integración Nacional, se perfiló hasta diciembre como el favorito de los electores, pero su discurso de mano dura se agotó en la recta final de la contienda.

Para el analista político independiente Jorge Vega, la indecisión del electorado costarricense puede ser señal de madurez de los votantes.

Fuente: Agencias

Contenido sugerido

Contenido GEC