París. El presidente estadounidense, Barack Obama, reafirmó el miércoles a su homólogo francés, Francois Hollande, su compromiso de "acabar con prácticas del pasado (...) inaceptables entre aliados" en materia de espionaje, informó la presidencia francesa.
La conversación telefónica entre ambos líderes, que se produjo tras las revelaciones en prensa sobre el espionaje por parte de la agencia de inteligencia norteamericana NSA a tres presidentes franceses entre 2006 y 2012, sirvió "para establecer los principios que deben gobernar las relaciones entre aliados en materia de inteligencia", indicó el Elíseo en un comunicado.
"El presidente Obama ha reiterado sin ambigüedad su compromiso firme, desde el estallido en noviembre de 2013 del caso Snowden, y como ya recordó en la visita de Estado (de Francois Hollande) en febrero de 2014, de terminar con las prácticas que pudieron haber tenido lugar en el pasado y que eran inaceptables entre aliados", subrayó el Elíseo.
"Responsables franceses de inteligencia viajarán a Washington próximamente para profundizar en la cooperación" entre ambos países, confirmó.
Obama y Hollande en el cementerio de Normandía. (AFP)
- ¿Contra Hollande? -
Más temprano Estados Unidos rechazó estar interviniendo las comunicaciones del presidente de Francia, Francois Hollande, y negó también que lo vaya a hacer en el futuro.
"No estamos interviniendo ni vamos a intervenir las comunicaciones del presidente Hollande", aseguró a Edward Price, portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca.
"De hecho, como hemos dicho anteriormente, no llevamos a cabo ninguna actividad de vigilancia en el extranjero salvo que haya una razón específica y comprobada de seguridad nacional", agregó, aunque no aludió a las acusaciones específicas de espionaje en el pasado durante los años 2006 y 2012.
El portavoz añadió, además, que esta premisa está siendo implementada tanto para los ciudadanos ordinarios como para los líderes internacionales.
La polémica se ha vuelto a desatar después de que los medios Libération y Médiapart publicaran filtraciones de WikiLeaks que reflejan que los servicios secretos estadounidenses presuntamente espiaron entre 2006 y 2012 a los tres últimos presidentes franceses: Jacques Chirac, Nicolás Sarkozy y Hollande.
"Estamos trabajando estrechamente con Francia sobre todos los asuntos de preocupación internacional, y los franceses son socios indispensables", concluyó.
Mientras tanto, el primer ministro de Francia, Manuel Valls, subrayó que EE.UU. ha violado la confianza de su país y pidió que repare "el daño causado" por esa práctica "inaceptable".
En la sesión de control al Gobierno en la Asamblea Nacional, el primer ministro tachó ese espionaje de "muy grave y anormal entre Estados democráticos aliados", y consideró que "no es legítimo" proceder a ese tipo de vigilancia "en nombre de los intereses nacionales".
Fuente: AFP / EFE