Tras su mediática boda con el príncipe Harry, Meghan Markle, ahora flamante duquesa de Sussex, tendrá que aprender a adaptarse a las estrictas reglas de la corona. Para este nuevo reto, la ex actriz contará con la ayuda de Samantha Cohen, la tutora del palacio británico que la adiestrará en sus nuevas funciones en los próximos seis meses.
Cohen, una australiana de 49 años casada con un dentista y madre de cuatro hijos, lleva trabajando 17 años en el palacio de Buckingham y, en varias ocasiones, cumple labores muy cercanas a la reina Isabel II, siendo una de sus secretarias privadas de más confianza.
La asesora es conocida en los círculos del palacio británico como una mujer directa y sensata, virtudes que hizo que algunos la llamen “The Panther” (la pantera, en español), apodo que al parecer ella disfruta.
Según el Daily Mail, la reina Isabel II fue la que tuvo la idea de pedir a Samantha Cohen que se mude al palacio de Kensington para ayudar, asesorar y enseñar a Meghan Markle.
Cohen se hará cargo temporalmente de las tareas de Edward Lane Fox, secretario del príncipe Harry, y asesorará a los nuevos duques de Sussex en diferentes aspectos relativos a su rol en la familia real.
El medio español El País destaca que la asesora enviada por el palacio de Buckingham empezó su labor al cumplir un rol importante en la boda real de Meghan Markle y el príncipe Harry, y en la primera aparición de la ex actriz como la duquesa de Sussex durante las celebraciones en los jardines de Buckingham por el cumpleaños del príncipe Carlos.
Cohen estará trabajando con los duques de forma especial en sus apariciones y su agenda durante un año. Mientras que para Meghan Markle “serán seis meses de escucha. Está buscando consejos de una variedad de personas, va a proceder con humildad. Sin embargo, no va a ser nada tranquilo. Va a ser una oficina muy ocupada. Ha trabajado todos los días de su vida, está acostumbrada a un horario exigente”, asegura una fuente citada por The Times.