Nubes mortales de ácido y fragmentos finos de vidrio surcaban el cielo de Hawái el lunes, luego de que la lava del volcán Kilauea llegó al océano, un nuevo peligro tras más de dos semanas de erupciones.
La agencia de Defensa Civil de Hawái advirtió a los automovilistas, navegantes y turistas en la playa que tengan cuidado con las nubes tóxicas de "laze", una combinación de "lava" y "haze" (neblina), que se formaron cuando dos corrientes de lava se mezclaron con agua de mar.
La pluma cáustica, que puede ser fatal si se inhala, es el último peligro de una erupción que no muestra señales de detenerse y que comenzó el 3 de mayo. El volcán ha producido alrededor de dos docenas de grietas que arrojan lava, el mismo número que en un anterior evento de 88 días en 1955.
La erupción ha entrado en una fase más violenta, en la que grandes volúmenes de roca fundida, más caliente y más rápida que el magma más viejo, están saliendo de las fisuras en el suelo que han estallado en una pequeña área de comunidades rurales.
"Hemos visto la fase 1. Hemos visto la limpieza del sistema. Llamamos a eso la fase de 'limpieza de garganta'", dijo Carolyn Pearcheta, geóloga operativa del Observatorio de Volcanes de Hawái, en una conferencia telefónica.
La lava ha destruido al menos 44 hogares y otras estructuras en el área de Leilani Estates y Laipuna Gardens del distrito de Puna.
Dos mil personas han recibido órdenes de salir de sus hogares debido a los flujos de lava y el gas tóxico de dióxido de azufre, cuyos niveles se han triplicado en los últimos dos días, según la Defensa Civil del Condado de Hawái. La Guardia Nacional de Hawái ha advertido de más evacuaciones obligatorias si se bloquean más carreteras.
Fuente: AFP