“Fue hermoso, pero trágico. Como Romeo y Julieta. No querían separarse”. Así describió Joanna Sisk la muerte de sus padres, dos septuagenarios estadounidenses que estuvieron casados durante casi 50 años y que fallecieron el 24 de noviembre a causa del COVID-19, con solo un minuto de diferencia entre sí.
MIRA: Gobierno del Reino Unido autoriza vacuna contra el coronavirus de Pfizer
Patricia Sipes McWaters, de 78 años, y Leslie McWaters, de 75, nacieron y crecieron en la ciudad de Jackson, Michigan. Su primera cita se produjo en el restaurante Julie’s Bar & Grill, lugar al que amaban ir a bailar, incluso tras 47 años de matrimonio, según detalló su entorno cercano en su obituario. Se casaron en abril de 1973 y tuvieron dos hijas, tres nietos y seis bisnietos, precisa “The Washington Post”.
- Inglaterra sale del confinamiento tras la aprobación de la primera vacuna
- Boris Johnson sobre la vacuna: “Nos permitirá recuperar nuestras vidas”
- ¿Por qué Donald Trump busca indultar a sus propios hijos?
El obituario de Pat y LD, como mejor los conocían, también detalla que la esposa, quien trabajo durante 35 años como enfermera en una sala de operaciones, era “la jefa” de la familia; mientras que Leslie era un veterano de la Marina que trabajaba como conductor de camiones y tenía “más amigos de los que alguien podía contar y los amaba a todos profundamente”.
Sisk sospecha que sus padres contrajeron el COVID-19 durante una de sus acostumbradas cenas en restaurantes, según detalló al diario local “Detroit Free Press”. La hija del matrimonio McWaters-Sipes recuerda haberles pedido en múltiples ocasiones que permanezcan en casa, pero le respondían que no era la forma en la que querían vivir su vida.
“Puedo decir que después de tener COVID-19, ambos estaban extremadamente arrepentidos porque realmente no se tomaron en serio [las advertencias de] que les podría quitar la vida”, dijo la hija al Post.
La pareja fue hospitalizada en el Henry Ford Allegiance Health y una semana después, el 24 de noviembre, fallecieron. El deceso de Pat se registró a las 4:23 p.m., mientras que el de LD se produjo menos de un minuto después, según el personal médico que los atendió. “Quienes los conocemos sabemos que mamá fue primero y dijo: ‘¡LD, es hora de irse!’”, escribieron sus familiares en su obituario.
Sisk aprovechó el interés mediático en el caso para hacer un llamado a no bajar la guardia ante la pandemia que, en Estados Unidos, viene contagiando a más de 13,8 millones de personas y produciendo al menos 272 mil muertes, según datos de la Universidad Johns Hopkins.
“La gente debería estar preocupada y tomarse el COVID-19 en serio”, señaló la mujer quien agregó que le había pedido a sus familiares que, en lugar de enviar flores, contribuyan al Fondo para la Ayuda de Desastres o la Sociedad de Lucha contra la Crueldad Animal, detalló el canal de TV local WXYZ, afiliado a la cadena ABC.
__________________________
VIDEO RECOMENDADO
Estados Unidos: Biden promete reconstruir la economía de una manera más equitativa
TE PUEDE INTERESAR
- Más de 20 ladrones roban banco en Brasil con toma de rehenes y disparos
- La península volcánica en Rusia donde se han encontrado decenas de nuevos minerales
- Quién es Yevgeny Prigozhin, el ‘Chef de Putin’ sindicado como la mente detrás de los trolls y mercenarios rusos
- EE.UU. sanciona a un socio del traficante mexicano “RCQ”, uno de los prófugos más buscados
- Activistas protestan contra Amazon frente a la casa de Jeff Bezos en Manhattan