Una mujer que estaba en custodia de la policía en Nueva York, en Estados Unidos, y que fue esposada mientras entró en labores de parto presentó una demanda contra ese departamento por violar sus derechos civiles, además de exigir cambios en esa política para evitar que vuelva a ocurrir.
La mujer, que ha pedido no ser identificada por haber sido una experiencia humillante y que la ha traumatizado hasta el punto de no haber podido contarlo a su familia, ha sido identificada solo como "Jane Doe" a efectos de la demanda, que presentó este jueves en la corte federal para el sur de Nueva York, señala hoy el diario "The New York Times".
La mujer, entonces de 27 años, tenía 40 semanas de gestación cuando salió de parto mientras estaba retenida en una celda en un cuartel de policía en el distrito de El Bronx, el pasado febrero.
La policía la llevó a un hospital cercano pero la esposó de manos a la camilla y encadenó sus tobillos, pese a las advertencias de los médicos de que esa acción es ilegal en Nueva York y afectaba el dar a luz.
Los oficiales alegaron que solo cumplían con las directrices de la Guía de Patrullas del Departamento de Policía, lo que el médico reportó en su informe sobre el parto, señala además "The New York Times".
No fue hasta después de una intensa hora de parto que los policías accedieron a quitar las esposas de una mano y los pies, pero la mujer tuvo a su hija con una mano esposada a la cama, señala la demanda, de acuerdo con el medio.
En la demanda, que incluye a varios policías y al Departamento, se reclama compensación, cuya cantidad no se especifica, por violación de sus derechos civiles y pide cambios en esa agencia municipal para que los agentes nunca vuelvan a encadenar a otra mujer embarazada bajo su custodia.
El documento legal recuerda que se ha violado una ley del estado del 2015 que prohíbe se restrinja a una embarazada o que esté dando a luz y durante las ocho semanas de recuperación pos-parto. Esta ley es del 2009 pero fue ampliada en el 2015.
Nueva York es uno de 26 estados que tiene esta prohibición y hay otros que han ido más lejos para prohibir cualquier tipo de restricción a una embarazada, destaca además el periódico. En 24 estados no existe ningún tipo de prohibición.
El concejal Ydanis Rodríguez expresó su preocupación por lo ocurrido, pidió que se realice una investigación y que de ser cierto, los responsables deberían enfrentar las consecuencias de sus acciones.
Rodríguez indicó además que pidió al concejal Donovan Richards, presidente del Comité de Seguridad Pública, que realice una audiencia pública al respecto y afirmó que esposar a una mujer durante el parto es "cruel y una práctica degradante que plantea serios riesgos de salud".
Fuente: EFE