No es común que en un mundo tan dominado por los intereses comerciales como el del deporte, las estrellas tomen partido por algo más allá que lo que se disputa en la cancha.
Por eso sorprende en Estados Unidos que muchos deportistas se estén sumando a la campaña "I Can't Breathe", en rechazo a la exoneración el miércoles pasado del agente que mató por estrangulamiento al hombre negro Eric Garner.
La decisión del gran jurado desató protestas en varias ciudades de EE.UU. que continúan aún este lunes y ha encendido aún más el debate sobre los abusos policiales contra la comunidad negra, tras otros casos recientes.
En los calentamientos previos a sus partidos varios deportistas vistieron camisetas con el eslogan "I Can't Breathe", que se ha convertido en uno de los principales lemas de las protestas y también en trending topic en Twitter.
Entre los que se han sumado a la iniciativa se encuentran la estrella de los Chicago Bulls Derrick Rose, y varios jugadores de fútbol americano.
Reggie Bush, Derrick Rose, other athletes show solidarity with #ICantBreathe movement: http://t.co/t8VqHZ0nWN pic.twitter.com/iVUH70Z4d8
— ABC News (@ABC) diciembre 8, 2014
También en el partido de la NBA de este lunes que enfrentó a los Cleveland Cavaliers frente a los Brooklyn Nets en Nueva York, varios jugadores, entre ellos LeBron James, considerado como el mejor basquetbolista de la la liga estadounidense, usaron camisetas con ese lema en el entrenamiento previo al partido.
En el caso de James, no es la primera vez que James que habla abiertamente sobre asuntos controvertidos.
En 2012 el deportista, que según Forbes percibe US$53 millones en patrocinios, se tomó una fotografía con los jugadores de su antiguo equipo, los Miami Heat, en la que expresaban su apoyo a los que pedían justicia en el caso de Trayvon Martin, un adolescente negro que murió por disparos de un vigilante en una comunidad residencial.
También deportistas en otros países han hecho muestra de un inusual activismo político.
En España, el exfutbolista del Sevilla, Frederic Kanouté, fue sancionado en el 2009 por los organizadores de la liga por mostrar una camiseta en apoyo a la causa palestina al celebrar un gol.
Zapatos deportivos
Este compromiso no suele ser del agrado de patrocinadores y los propios equipos de estos deportistas.
Aún hoy se recuerda la ocasión en que preguntaron a Michael Jordan por qué no apoyaba a un candidato a senador demócrata en su estado de procedencia, Carolina del Norte.
"Los republicanos también compran zapatos deportivos", dijo Jordan.
En opinión del profesor de derecho de la American University Wallace Perry, los deportistas de la generación actual se han dado cuenta de que tienen la responsabilidad de hablar sobre ciertos asuntos, como es el ejemplo del abuso policial contra la comunidad negra en EE.UU.
Perry dice que la percepción en la comunidad negra de deportistas como Jordan o el golfista Tiger Woods se vio afectada por su silencio en determinados momentos.
"Estaban mal asesorados en materia de relaciones públicas", le dijo Perry a BBC Mundo.
No obstante, Perry sabe por experiencia propia que hablar puede tener un costo severo.
Él, que en 1967 se convirtió en el primer basquetbolista negro en la Conferencia Suroeste de baloncesto universitario, sufrió rechazo por su activismo contra el racismo en el sur del país.
"Me comenzaron a rechazar, no me hablaban. Retiraron fotos mías del gimnasio", dijo Perry.
A pesar de ello, en aquellos años era más común que los deportistas expresaran sus opiniones políticas. Una de las imágenes de los años 60 fue la de los atletas negros John Carlos y Tommie Smith levantando sus puños con guantes negros en el podio de medallas en los Juegos Olímpicos de Ciudad de México en 1968.
Tras décadas en que el interés comercial primó ante la libertad de expresión, ahora el resurgir reciente del activismo podría estar siendo animado por las redes sociales.
Los deportistas de hoy se han acostumbrado a usar plataformas como Twitter para hablar con mayor libertad, dice Billy Hawkin, profesor de la Universidad de Georgia.
"Ahora son más conscientes de la influencia que tienen", dice Hawkin.
Hawkin añade que los deportistas de hoy han tenido una socialización distinta a los de la era de Jordan, desde la música que escuchan hasta la tecnología a la que tienen acceso.
"Creo que hay una masa crítica de deportistas que quiere hablar abiertamente sobre asuntos controvertidos, sin importarles lo conservadora o apolítica que puedan ser las organizaciones a las que pertenenecen".