Weed, AP
Un incendio alimentado por fuertes vientos atravesó el viernes un poblado pequeño cerca de la frontera de Oregón, dejando en escombros una iglesia y destruyendo 100 casas, lo que ocasionó órdenes de evacuación para al menos 1.500 personas, dijeron hoy las autoridades.
Este pequeño poblado, ubicado cerca de la base del monte Shasta en la cordillera de las Cascadas, estuvo bajo asedio de un incendio de 140 hectáreas de bosque maderable.
El aserradero del poblado se quemó, y una iglesia católica quedó destruida.
El incendio comenzó alrededor de la 1:30 p.m. al sur de Weed, un poblado pintoresco de cerca de 3.000 habitantes ubicado 80 kilómetros al sur de la frontera de Oregón y aproximadamente a la mitad de camino entre San Francisco y Portland, Oregón.
"Se movió rápidamente, empujado por ráfagas de viento de hasta 64 kilómetros por hora", dijo Daniel Berlant, vocero del departamento estatal de bomberos. "Ingresó y rodeó el poblado", señaló.
Pedazos de madera incandescentes impulsadas por el viento iniciaron incendios a 800 metros de distancia del frente del incendio principal, y se emitieron órdenes de evacuación para Weed y las subdivisiones de Carrick y Lake Shastina, dijeron las autoridades.
Se ordenó desalojar a entre 1.500 y 2.000 personas, dijo Allison Giannini, vocera del Departamento del Alguacil del Condado Siskiyou.
Más de 800 bomberos, ayudados por aeronaves, combatieron el fuego.
Los vientos comenzaron a amainar hacia el final del día de hoy, y el avance del incendio disminuyó. Al anochecer estaba contenido en un 15%, pero seguía avanzando, señaló Susie Brady, vocera de los bomberos estatales.
"Esperamos que los vientos se calmen esta noche", añadió.
El incendio inició al este del poblado y avanzó a través del área.
"Suelo negro, muy plano. Muchos árboles quemados, mucha tristeza, gente asustada", dijo Brady.
La autopista Interestatal 5, la principal carretera entre California y Oregon, fue cerrada en el área.
Weed, históricamente un poblado maderero, recibió el nombre del fundador de un molino, Abner Weed, quien "descubrió que los fuertes vientos de la zona ayudaban a secar la madera", según el sitio de internet del poblado.