Los intentos de Trump por acercarse a Latinoamérica
Los intentos de Trump por acercarse a Latinoamérica
Redacción EC

Latinoamérica y el nuevo gobierno de no tuvieron un comienzo auspicioso. Entre los anuncios de nuevas leyes migratorias, suspensión de tratados y la construcción de un muro en la frontera con México, la elección del presidente Donald Trump se volvió un mal augurio para los países del continente.

Y eso, al parecer, es algo que el jefe de Estado está buscando revertir. Activando la "diplomacia telefónica", el mandatario ha comenzado a lanzar guiños a las naciones de la región intentando dar un giro a las negociaciones, centrándolas en un frente en específico: Venezuela.

Entre los primeros que recibieron esa declaración de buenas intenciones está Perú, Argentina y Colombia. Luego de que asumiera el poder el 20 de enero pasado, el ex empresario conversó vía telefónica con los jefes de Estado de los tres países.

En su intercambio con el presidente colombiano, Juan Manuel Santos, Trump le aseguró que revisaría personalmente el apoyo de Washington al programa que pone en marcha el acuerdo de paz con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), y se habría demostrado interesado en pactar una cita entre ambos en la Casa Blanca.

Después sería el turno del presidente peruano Pedro Pablo Kuczynski, quien además de tener su diálogo telefónico, se convertiría en el primer líder de la región en mantener una reunión cara a cara con la nueva autoridad estadounidense.

Aunque fueron solo 15 minutos de encuentro, el jefe de Estado del país norteamericano se mostró complacido con su par peruano."Perú ha sido un vecino fantástico, hemos tenido una gran relación, mejor ahora que nunca antes (…) es un gran honor tener al presidente Kuczynski con nosotros", sostuvo.

Kuczynski, por su parte, aseguró que la reunión fue "muy cordial y constructiva" a pesar de mantener algunas diferencias de opiniones, y espera que Trump visite Lima en 2018.

—"Tenemos un problema con Venezuela" —

Pero además de dar señales de amistad, el Mandatario ha aprovechado las instancias diplomáticas para comenzar con las negociaciones sobre uno de los temas que ha captado su atención respecto de la zona: la situación interna en Venezuela.

El 15 de febrero pasado publicó a través de Twitter una fotografía de su reunión con la esposa del "preso político" venezolano Leopoldo López, Lilian Tintori.

El jefe de Estado solicitó la liberación "inmediata" del dirigente opositor, quien cumplió tres años privado de libertad tras ser responsabilizado por las protestas contra el presidente Nicolás Maduro en 2014.

El tema lo volvería a abordar en su cita con Kuczynski, después de que EE.UU. impusiera sanciones al vicepresidente venezolano, Tareck El Aissami, a quien acusan de narcotráfico.

"Tenemos un problema con Venezuela, que lo está haciendo muy mal", dijo. Desde entonces, la situación política venezolana se transformaría en su principal área a tratar con los mandatarios de la zona.

De hecho, fue el tema central en su conversación con el máximo líder argentino, Mauricio Macri, quien lleva la presidencia pro témpore del Mercosur y quien ha sido una de las autoridades latinoamericanas más críticas con Maduro.

Asimismo, en los 15 minutos de contacto, ambos valoraron la relación bilateral, y Trump invitó a Macri a mantener un encuentro en el palacio de Gobierno en Washington. La crisis en Venezuela también fue recurrente en los diálogos que mantuvo este fin de semana con el jefe de Estado brasileño, Michel Temer y con la presidenta Michelle Bachelet.

En su intercambio de palabras con Temer, Trump habría enfatizado que Brasil es un "socio clave en el Hemisferio Occidental" y en la importancia de mantener "el respeto a los derechos democráticos y humanitarios en Venezuela".

En tanto, el domingo abordó con Bachelet la relación bilateral entre ambos países, pero también "expresó su preocupación por la situación en Venezuela y los líderes coincidieron en la importancia de avanzar los principios democráticos en todo el Hemisferio Occidental", informó la Casa Blanca.

—Sin acercamientos—

A pesar de los intentos por mejorar sus relaciones con Latinoamérica, el nuevo Gobierno de EE.UU. aún mantiene tensiones con algunos de sus vecinos de más al sur, además de Venezuela.

Tal es el caso de México y su presidente Enrique Peña Nieto, quien se ha enfrentado a Trump por la polémica medida de la construcción del muro en la frontera de ambos países.

La última diferencia surgió poco antes de que Peña Nieto viajara a Washington para ser el primer mandatario latinoamericano en reunirse con Trump tras su asunción. Sin embargo, la cita fue suspendida, luego de que éste último afirmara que era mejor que no lo visitara, si es que México no estaba dispuesto a pagar por el muro.

El ex empresario tampoco ha tenido buena recepción con los líderes de Bolivia, Evo Morales, y Ecuador, Rafael Correa, quienes han demostrado públicamente su descontento con la victoria del ex magnate en las elecciones del pasado 8 de noviembre.

Aún así, la estrategia para estrechar lazos del nuevo presidente de EE.UU. ya está en la mesa. Una señal que podría dar vestigios sobre el futuro de la región durante la era Trump.

Fuente: EMOL, GDA

LAS ÚLTIMAS NOTICIAS DEL MUNDO...

Contenido sugerido

Contenido GEC