Tras la sorpresiva victoria de en las elecciones de y aún en medio de la incredulidad, el presidente expresó sus deseos de unidad para el gobierno que llevará el magnate republicano.

"Ahora todos esperamos que tenga éxito en unificar y liderar al país", dijo Obama, quien había expresado su esperanza de que los votantes rechazaran la retórica racista de Trump y optaran por la experiencia política de Hillary Clinton, aunque ello probó ser una apuesta equivocada.

"Quiero asegurarme de que este traspaso de poder sea bien ejecutado porque finalmente todos estamos en el mismo equipo. Es lo que oí anoche en el discurso de Trump. Es lo que oí cuando hablé personalmente con él. Y me sentí alentado por ello", señaló.

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Sobre la ex secretaria de Estado, el mandatario afirmó: "No puedo estar más orgulloso de ella. Ha tenido una extraordinaria vida de servicio público".

La profundidad y el alcance de la derrota demócrata, con la Casa Blanca y ambas cámaras del Congreso bajo control republicano, representan un enorme repudio a la era Obama.

El mandatario saliente tendrá ahora que aplacar a los mercados financieros y a sus aliados y asegurarles que seguirá siendo un socio confiable.

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Fuente: Agencias

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