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El grande europeo, Alemania, sufre una baja en una cartera sensible: Christine Lambrecht acaba de renunciar al Ministerio de Defensa. Su decisión responde a los “meses de críticas desde su propio partido y desde otros y en los medios de comunicación especialmente en relación con decisiones vinculadas con la guerra en Ucrania”.
Así lo consigna Euronews, quien recuerda que Lambrecht indignó a los alemanes con un “videomensaje grabado en una calle de Berlín” a fines del año pasado. Allí, ella destacó que, como consecuencia de la guerra entre Rusia y Ucrania, pudo llevar a cabo “muchos encuentros con personas interesantes y formidables”. Y agregó: “Por todo ello, les doy las gracias”.
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No fue la única polémica en la que estuvo envuelta.
La agencia EFE recuerda que ella “utilizó un helicóptero del ejército para irse de vacaciones con su hijo”. Lambrecht se negó a comentar hasta que un corte la obligó a reconocerlo.
Pero lo que realmente marcó su gestión fueron sus decisiones desafortunadas. Poco antes de ser invadidos, el presidente de Ucrania, Volodymyr Zelensky, pidió el apoyo alemán y armas pesadas. Ella respondió anunciando el envío de 5 mil cascos.
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Además, ABC recuerda que ella “prohibió viajar a los periodistas críticos en sus desplazamientos para visitar a las tropas en el extranjero”.
Su renuncia -a pesar de contar el respaldo del canciller Olaf Scholz- se entiende en ese contexto.
Lambrecht argumentó que su salida responde a que “la focalización de los medios” en su persona le impedía tomar decisiones objetivas sobre “los soldados, la Bundeswehr [el ejército alemán] y las orientaciones de la política de seguridad en interés de los ciudadanos alemanes”.
AFP anota que su salida causa un pequeño sismo dentro del Gobierno alemán.
Mientras que el mundo los presiona para enviar tanques a Ucrania, se viene una cumbre importantísima. “Este viernes, además, se celebrará una reunión de los aliados occidentales, en torno a Estados Unidos, en la base estadounidense de Ramstein, en el oeste de Alemania”, escribe la agencia. En esa junta se discutirán las “nuevas ayudas” para los ucranianos.
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Su vida política
Christine Lambrecht tiene 57 años y, durante la gestión de la excanciller Angela Merkel, trabajó como ministra de Justicia.
Lambrecht nació en Mannheim, el 19 de junio de 1965, y tiene un hijo. En 1982 se unió al SPD (Partido Socialdemócrata) y luego siguió estudios de leyes en las universidades de Mannheim y Mainz.
Más tarde, en diciembre del 2021, se convirtió en ministra de Defensa. Ella, según EFE, debió encargarse de la modernización del ejército alemán, una tarea que no pudo llevar a cabo con éxito.
El portal ABC, recuerda que, en su primera entrevista como titular de dicha cartera, ella “admitió que no conocía las filas de la Bundeswehr” y “cinco meses después, confesó que según sin distinguir los grados militares”. No fue lo único. El medio agrega:
“Fueron muy polémicas sus vacaciones de Pascua en Sylt, en un contexto de guerra en suelo europeo, y cuando el canciller Scholz proclamó el ‘cambio de era’ y anunció un presupuesto extraordinario de 100.000 millones de euros para rearmar el ejército alemán, Lambrecht continuó hablando de ‘política de desarme’”.
