Cuatro inmigrantes permanecen detenidos por la muerte de la adolescente de 16 años Desirée Mariottini, que fue drogada, violada en grupo y abandonada en un edificio desahuciado de Roma conocido como punto de encuentro de narcotraficantes, según las autoridades de Italia.
Los sospechosos son dos senegaleses que viven en Italia como indocumentados, un nigeriano con permiso de residencia y un gambiano. Todos están detenidos bajo cargos de homicidio, ataque sexual en grupo y entrega de drogas por la muerte de Desirée Mariottini.
El portal Infobae indicó que la autopsia al cuerpo de Desirée Mariottini, fallecida el 19 de octubre, revela que la joven murió de un paro cardiorespiratorio producto de la falta de atención médica. Además, se indica que pudo ser salvada si quienes estaban con ella llamaban al número de emergencias.
De los análisis se desprende que la joven permaneció en una improvisada cama sucia durante más de 10 horas, ante la indiferencia de quienes tomaban licor cerca de ella.
En ese lapso de tiempo, la joven, que se drogó hasta perder la conciencia, fue violada en grupo.
La autopsia también reveló, además, que su cuerpo estaba lleno de drogas y psicotrópicos.
"Le dieron agua y azúcar mientras moría. Luego, cuando vieron que se estaba volviendo cianótica, la pusieron en un sofá y después murió", reveló un terrible testimonio publicado por Il Messaggero sobre cómo fueron las últimas horas de Desirée Mariottini.
Cuando finalmente alguien dio el aviso de alerta y los servicios de emergencia llegaron al lugar, el portón de entrada fue cerrado con un candado y los médicos tuvieron que esperar que la policía les abriera paso. El tiempo perdido fue fatal para Desirée.
El sitio donde murió Desirée Mariottini es usado para la venta y consumo de heroína. Está situado en el histórico barrio San Lorenzo de Roma.
Desirée Mariottini había llegado hasta allí el 17 de octubre en busca de drogas. Muriel, testigo y uno de los acusados, contó que la menor "se presentó como Desy y buscaba cualquier sustancia que pudiera mitigar su abstinencia. Me pidió una vez que le inyectara heroína pero no acepté. Ya no tenía dinero y se acercaba con insistencia y confianza a cualquier persona que pudiera ofrecerle drogas".
Según la policía al no disponer de dinero, Desireé aceptó tener sexo a cambio de droga.
El rumor de que "la chica blanca estaba disponible" cada que salía del trance de las drogas se difuminó en el edificio.
"El pasado jueves (18 de octubre) a las 19:50 horas estuve allí para comprar cocaína y un tunecino de unos 40 años, Hyten, me invitó a seguirlo y me mostró un contenedor donde había una chica inconsciente. La vestí, aunque no encontré sus zapatos. La niña, aunque con dificultad, respiraba, pero estaba completamente inconsciente. No me di cuenta de que su vida estaba en peligro, pues otras veces había visto a otras personas simplemente "duras" que luego se recuperaban en unos momentos. A las 3 de la madrugada, Youssef (Yusif Saila, el cuarto sospechoso detenido) me dijo que estaba muerta", cuenta Muriel.
Una testigo citada por el diario italiano 'Il Corriere della Sera' declaró que ya había visto antes a Desireé y que su presencia le pareció extraña debido a que el lugar era un lugar muy peligroso para una menor de edad.
El viernes (19 de octubre) a la 1:30 de la madrugada, esta testigo identificada como Giovanna encontró a Muriel "arremetiendo contra Desirée" e insultándola. A pesar de la escena, Muriel la saludó con normalidad mientras Desirée se encontraba "en un colchón sin vida". Giovanna afirma que corrió a tomar el pulso a la joven.
"Intenté hacerle un masaje cardíaco pero enseguida me di cuenta de que era demasiado tarde. Por su aspecto, entendí que había estado en esas condiciones durante muchas horas y grité que llamara a una ambulancia de inmediato".
Nadie hizo nada.
Según el informe policial, Desirée fue "primero drogada y luego sometida a relaciones sexuales repetidas sin consentimiento". Tiene "varias lesiones encontradas en el cuerpo y en partes íntimas". La policía no descarta que mientras ella era violada, sus abusadores la mantenían inmovilizada de los brazos y las piernas. Fueron largas horas de agonía.
Los detenidos son definidos así : "Depredadores que han violentado salvajemente y sin ninguna piedad a una chica muy joven e indefensa... le dieron agua y azúcar mientras moría. Luego, cuando vieron que se estaba volviendo cianótica, la pusieron en un sofá y murió".
Otros testigos indican que los acusados les gritaban a aquellos que quisieron ayudar a Desirée, "mejor ella muerta que nosotros en la cárcel".
Según el diario, Il Messaggero, otro detenido por el caso fue Pako, cuyo nombre real es Mamadou Gara, de 27 años. Según declaró a la policía, reconoció conocer a Desirée: "Sí, tuvimos relaciones sexuales, pero no la violé. Cuando me fui, ella todavía estaba viva", aseguró.
"Nunca habría tocado a Desirée. Era una niña", declaró Chima Alinno a través de su abogado Y agregó: "No tengo nada que ver con esta historia. No fui yo, fueron otros".
La policía además agrega que no era la primera vez que Desirée ingresaba a "La casa de la droga". Antes de su trágico final, durante el último mes, había frecuentado el lugar en varias oportunidades víctima de su adicción a las drogas.
El homicidio ocurrido la semana pasada causó gran indignación por la negligencia y degradación existente en zonas de la capital italiana que han sido relegadas a las pandillas y narcotraficantes. También ha atizado el debate sobre el control migratorio.
El ministro de Interior Matteo Salvini, intransigente en materia de inmigración, dijo que arrestarían pronto a otro sospechoso. "Los gusanos de este horror pagarán (por esto)", dijo.