Es un hallazgo que tiene a Italia atenta.
Este lunes, durante unos trabajos de restauración en la embajada vaticana en ese país, se hallaron restos óseos humanos.
Tan pronto se produzco el hallazgo la gendarmería vaticana informó a las autoridades italianas y a la Santa Sede, y se abrió una investigación.
Un comunicado del Vaticano afirma que los expertos están tratando de determinar la edad y el sexo de la persona a la que pertenecen los restos, y la fecha de la muerte.
Pero ya hay teorías.
¿Emanuela Orlandi?
Los medios italianos especulan que los huesos podrían pertenecer a la hija adolescente de Ercole Orlandi, un empleado del Vaticano desaparecida en 1983.
Emanuela Orlandi tenía 15 años cuando desapareció después de dejar a su familia en su apartamento dentro del Vaticano para dirigirse a una clase de música.
En su momento, su caso fue vinculado tanto con el crimen organizado como con un intento de forzar la liberación de la cárcel de Mehmet Ali Agca, el turco que intentó asesinar al papa Juan Pablo II en 1981.
El hermano de Orlandi, Pietro, lleva décadas intentando averiguar qué le pasó y ha acusado al Vaticano de permanecer en silencio.
Sin embargo, la Santa Sede asegura que ha cooperado plenamente con la policía.
Casos conectados
Pero los restos también podrían pertenecer a Mirella Gregori, que desapareció en Roma 40 días antes que Orlandi, también a la edad de 15 años, según medios locales.
Gregori contestó al portero eléctrico de su apartamento y le dijo a sus padres que era un amigo de la escuela.
Contó que iba a salir para hablar con él y nunca volvió.
Los detectives creen que los casos están conectados.