Roger Zuzunaga Ruiz

En la tarde del miércoles, el presidente de Bolivia, Luis Arce, sorprendió al denunciar que era objeto de un intento de golpe de Estado. Ello luego de que el general del Ejército Juan José Zúñiga y un grupo de militares llegaran fuertemente armados a la Plaza Murillo, donde está la sede del Gobierno. Pero cuatro horas después, el jefe militar ya estaba destituido y arrestado, mientras el mandatario se daba un baño de popularidad rodeado de cientos de simpatizantes que llegaron hasta el centro del poder. ¿Qué pasó en realidad? ¿Fue un montaje? ¿Qué consecuencias le esperan a la nación y al Ejecutivo?