Agencia EFE

sumó 335 nuevas muertes asociadas al , con lo que el balance total de fallecidos subió hasta los 141.741, según informó el Gobierno este domingo, en el que se registraron nuevas aglomeraciones en las playas y parques del país, pese a las medidas de distanciamiento social vigentes.

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El Ministerio de Salud informó en su boletín diario sobre la enfermedad que el número de infectados creció hasta los 4.732.309, tras reportar 14.318 casos en las últimas 24 horas.

Brasil es el segundo país del mundo en número de óbitos, después de Estados Unidos, y el tercer con más infectados, por detrás de EE.UU. y la India.

Los números diarios de la pandemia suelen ser inferiores durante los fines de semana en Brasil debido a la menor actividad de los órganos públicos y los laboratorios.

La tasa de incidencia sigue al alza y se ubica ahora en los 2.251,9 casos por cada 100.000 habitantes, lo cual significa que la transmisión del virus es aún muy alta en el país, a pesar de la desaceleración registrada en las últimas semanas.

El índice de mortalidad es de 67,4 decesos por cada 100.000 habitantes en este país de 212 millones de habitantes.

Las autoridades sanitarias investigan además otros 2.511 óbitos que podrían estar vinculados con la COVID-19.

El Gobierno también destacó que 4.060.088 pacientes se han curado de la enfermedad, un 85,8 % del total de contagiados.

NUEVA JORNADA CON PLAYAS Y PARQUES ABARROTADOS

El estadio de Río de Janeiro, el tercero más poblado del país y el segundo con más óbitos por la pandemia (18.278), ha registrado en los últimos nueve días un alza en la media de decesos por la COVID-19.

Ese preocupante escenario no ha impedido que las playas de su capital homónima, la ‘Cidade Maravilhosa’, vivieran este domingo una nueva jornada de intensas aglomeraciones.

La altas temperaturas de este primer fin de semana sacaron de sus casas a cientos de bañistas, que abarrotaron las conocidas playas de Copacabana e Ipanema en contra de las medidas de distanciamiento social aún en vigor.

La gente disfruta de la playa Ponta Negra a lo largo del río Amazonas, en medio de preocupaciones sobre la propagación de la enfermedad del coronavirus (COVID-19) en Manaus, Brasil. (REUTERS / Bruno Kelly).
La gente disfruta de la playa Ponta Negra a lo largo del río Amazonas, en medio de preocupaciones sobre la propagación de la enfermedad del coronavirus (COVID-19) en Manaus, Brasil. (REUTERS / Bruno Kelly).
/ BRUNO KELLY

Además, bastante personas caminaron sin mascarilla por la orla de Copacabana, según imágenes divulgadas por los medios de comunicación.

Río comenzó en junio un plan de desescalada que ha permitido la flexibilización gradual de las restricciones sanitarias, pero aún hoy está prohibido permanecer en la arena de la playa. Solo están liberados los baños en el mar.

El estado de Sao Paulo, el más poblado del país y el que tiene los peores números con 972.237 casos y 35.108 decesos, también registró altas concentraciones de personas en los parques públicos de la capital paulista, así como en las playas de su litoral.

Tanto en Río como en Sao Paulo se registraron las temperaturas más altas en lo que va de año, 39,2 °C y 34,5ºC, respectivamente, según señaló el portal G1.

Los expertos epidemiológicos alertan desde hace semanas de un repunte de casos en el país, como ya ocurre en el estado de Amazonas (norte), si la población no mantiene el distanciamiento social y el uso de la mascarilla.

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