Quito. Las ciudades de Quito y Guayaquil ultiman detalles para la visita del Papa Francisco, que llegará este domingo a Ecuador, país que recibe por segunda vez a un sumo pontífice tras la visita de Juan Pablo II hace treinta años. Las autoridades incluso presentaron el vehículo que utilizará el Papa en durante su visita.
Monseñor Fausto Trávez, presidente de la Conferencia Episcopal Ecuatoriana, bendijo anoche el papamóvil, un todoterreno austero.
El ministro del Interior, José Serrano, indicó que la adquisición del vehículo se hizo gracias a donantes anónimos. Se trata de personas naturales y empresas que pidieron no ser nombradas.
El Ministro entregó las llaves del papamóvil a Trávez y él lo condujo. Es un automático.
En tanto, el presidente de Ecuador, Rafael Correa, visitó el parque Bicentenario, donde el Papa Francisco ofrecerá el próximo martes una misa multitudinaria.
Durante su visita, Correa y otras autoridades del país, entre ellos el canciller, Ricardo Patiño, revisaron el plan de seguridad en el parque, situado en el norte de Quito, donde antes funcionaba el aeropuerto internacional de la ciudad, y donde se realizaron simulacros para afinar respuestas ante eventuales emergencias.
(Foto: AP)
En la zona, hasta donde acudieron voluntarios que ayudarán en la logística el próximo martes, se aseguró de que en caso de alguna emergencia médica durante la misa del papa habrá un helicóptero y varias ambulancias para trasladar a los afectados a distintos hospitales públicos.
Por otra parte, en la ciudad de Guayaquil, que visitará el papa el próximo lunes, un total de 600 sacerdotes y 4.500 voluntarios colaborarán con las actividades sacramentales y de logística en la misa que se celebrará en el Parque Samanes, al norte de la ciudad, donde se calcula que llegarán 1,2 millones de personas.
El padre César Piechestein, vocero de la Arquidiócesis de Guayaquil, aseguró que los sacerdotes que asistirán son de las provincias del centro y del sur del país: Manabí, Guayas, Los Ríos, Bolívar, Azuay, El Oro y Loja.
Los presbíteros, explicó Piechestein, tendrán varias tareas por cumplir. "Está planificado que haya sacerdotes concelebrantes, que estarán ubicados al pie del altar junto con los obispos que van a concelebrar", dijo.
Los otros sacerdotes formarán grupos de 4 y 5 integrantes, que se ubicarán en cada uno de los 32 bloques en que estará dividido el área del Parque Samanes donde se desarrollarán los eventos de la misa del papa.
Estos sacerdotes, explicó el vocero, tienen la misión de confesar a los creyentes antes de la ceremonia, y luego se encargarán de entregar la comunión, con ayuda de 900 ministros de la eucaristía que también están convocados para ese día.
Piechestein manifestó que en total habrá 150 capillas eucarísticas en las 50 hectáreas de parque que fueron arregladas para la visita del sumo pontífice.
Los 4.500 voluntarios se encargarán de recibir a los visitantes, ubicarlos en los diferentes bloques y colaborar con su salida.
Además, portarán letreros y banderas para orientar a las personas y otros se encargarán de distribuir agua y prestar atención a quienes pudiesen tener algún problema de salud, entre otros asuntos.
Para realizar estas actividades los voluntarios han participado en varias capacitaciones y simulacros desde el pasado 14 de junio.
Según la Conferencia Episcopal Ecuatoriana, Francisco llegará el 6 de julio a la Base Aérea de Guayaquil, a las 09:00 a.m. hora local, y de ahí se trasladará al Santuario de la Divina Misericordia, al oeste de la ciudad, para luego ir al Parque Samanes para oficiar la misa a las 11.45 a.m.
Tras la ceremonia se retirará al Colegio Javier, para almorzar en privado con la Comunidad de los jesuitas y el séquito Papal antes de regresar a Quito ese mismo día.
El pontífice realizará una gira por Ecuador, Bolivia y Paraguay del 5 al 13 de julio
Fuente: EFE/ El Comercio, Ecuador (GDA)